En medio de los dimes y diretes sobre la decisión del Consejo de Ministros de instalar caudales ecológicos en el río Tajo para 2027, algo que reduce la cantidad del trasvase Tajo-Segura y que supone un hitó «histórico» para la conservación del río, están los datos.
La Cátedra del Tajo UCLM-Soliss se ha hecho una pregunta esclarecedora: «¿Es cara el agua del trasvase?». Beatriz Larraz, directora de la Cátedra, ha respondido de manera rotunda. «No».
«Subvenciones, no recuperaciones de costes y aumento de tarifas»
Larraz, que junto Enrique San Martín ha analizado los datos del trasvase en el Congreso Ibérico del Agua, concluye que el agua del trasvase que llega al Levante no son caras por varios motivos. Han expuesto sus conclusiones en una publicación en sus redes sociales y que puedes ver aquí.
En primer lugar, por «subvenciones». «Se han identificado más de 1.200 millones de € en subvenciones hasta 2021«, explican desde la Cátedra. Unas ayudas que no «están debidamente identificadas y justificadas como una excepción a la recuperación de costes de la Directiva Marco del Agua».
A ello, se suma que «los usuarios del trasvase no recuperan los costes de la infraestructura», «no se pagan costes ambientales» y las tarifas «decrecen». La conclusión para la Cátedra es clara, como el agua limpia: «No puede decirse que el agua del trasvase sea cara«.
La Cátedra del Tajo cuestiona los planes de la cuenca del Tajo: «Se detectan serias deficiencias»