La Federación Empresarial Toledana (Fedeto) ha valorado como una «nueva improvisación de incalculables consecuencias» la medida adoptada por el Gobierno central de establecer un permiso retribuido para los trabajadores que, tras la ampliación del confinamiento decretado, tengan que quedarse en sus casas.
Fedeto entiende que, de esta forma, si antes los despidos basados en el coronavirus eran declarados improcedentes, ahora «serán nulos de pleno derecho dado que se ha establecido un permiso retribuido». Así, «parece que el objetivo es poner fin a la cantidad de prestaciones que se está viendo obligado a abonar el estado por los miles de ERTE que se han autorizado en unos pocos días».
Desde la patronal -a través de una nota de prensa- señalan que si el Gobierno no tuviera como objetivo dejar de pagar prestaciones habría decretado el cese de la movilidad y habría permitido a las empresas adoptar sus propias decisiones. «Si el Gobierno velara por las empresas habría adoptado, además, medidas para deahogarlas financieramente, eliminando cotizaciones e impuestos. Pero no, les impone el pago de un permiso retribuido que muchas solo van a poder pagar si obtienen financiación, algo que no es posible en estos momentos para muchas, sobre todo, para pymes y autónomos».
Para la Federación Empresarial Toledana, de materializarse este nuevo anuncio, serán incalculables los daños para la economía y para las empresas. «Los cierres de empresas se van a contar por miles y los parados, en el medio plazo, por millones».