El contrato-programa que aún negocian la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y el Gobierno regional, que podría ver la luz en el mes de octubre, debería asumir, según el rector de la UCLM, Julián Garde, al menos el pago de las nóminas de la universidad, que según vaticina acabarán por superar los 200 millones al año en el próximo lustro. Al margen, se negocia un plan de infraestructuras paralelo.
Así lo ha avanzado el rector de la institución académica en una entrevista con Europa Press, en la que ha explicado que además de la financiación básica que contemple los gastos derivados del buen funcionamiento de la UCLM y que deberá estar vinculada al cumplimiento de unos objetivos, trabajan con el Ejecutivo autonómico en un plan de inversiones para poder desarrollar en este mandato y en años posteriores las infraestructuras que necesitan los distintos campus.
La infraestructura más urgente: Medicina en Ciudad Real
Sobre este asunto concreto, ha avanzado que quizá la infraestructura más urgente por su demora de más de una década sea el edificio de Medicina del campus de Ciudad Real.
«Hasta el momento las condiciones y la situación es favorable y positiva y confío en cerrarlo en el mes que entra como muy tarde. Esperamos que lo que recibamos sea lo que necesitamos para que la universidad funcione y siga siendo el motor de la región. Si el acuerdo es el que esperamos, lo diremos, si no, también. Ese ejercicio de transparencia lo tenemos que hacer», ha avisado Garde.
Preguntado por la cifra que supone ese acuerdo de mínimos, explica que saldrá de la combinación de lo que sumen la subvención nominativa y los fondos europeos, Feder y Fondo Social. Respecto a esta cuestión, ha detallado que una parte importante de los fondos europeos sirve para financiar la investigación y, en este caso, la cifra de subvención nominativa para cada año puede oscilar.
«Los fondos europeos pueden aminorar la parte que venga a investigación y, probablemente, la que venga a infraestructuras educativas, pero lo que es innegociable es que la parte nominativa tiene claramente que cubrir y estar por encima de las nóminas del personal de esta universidad, como ocurre en cualquier servicio público de esta región», ha avisado.
Insuficiente la financiación con los nuevos cursos
Tras explicar que este 2021 la UCLM ha percibido del Gobierno regional una subvención nominativa de 181 millones de euros para «nóminas, becas de los estudiantes y algo de gasto de funcionamiento y poco más», ha precisado que esa cantidad, para próximos ejercicios, sería «insuficiente», pues en este curso 2021-2022 se han puesto en marcha los cuartos cursos de seis nuevas titulaciones y los terceros cursos de otras dos y eso conlleva un incremento de plantilla y de gastos de funcionamiento muy importante.
«Además de los nuevos profesores, la UCLM es una institución que de un año a otro tiene un crecimiento vegetativo en nómina que ronda los 2,4 millones de euros, porque los profesores hacen su trabajo muy bien y reciben una serie de complementos retributivos. Me refiero, fundamentalmente, al Personal Docente e Investigador y a los trienios, quinquenios y sexenios. A esto se añade el sexenio de transferencia que ha puesto en marcha el Estado», ha explicado.
Por ello, incorporando todas estas variables, ha cifrado en más de 200 millones de euros la cantidad que la universidad regional necesitará para pagar las nóminas dentro de cinco años, con una proyección teórica. «Hay que afinar y en esto estamos trabajando» ha señalado el rector, que ha añadido que quedan pendientes reuniones esta semana y la siguiente para «perfilar de verdad» estas cuestiones.
«El Gobierno está pidiendo información adicional, se la estamos trasladando para cerrarlo en este mes de octubre», ha explicado Garde, que ha insistido en que el contrato-programa tendrá una vigencia de cinco años para desvincularlo de los procesos electorales de la institución académica.
«Es muy importante. Es lo que está ocurriendo ahora. El nuevo equipo rectoral se encuentra con muy poco tiempo para elaborar un programa que tiene que entrar en vigor el año que viene. Además, ha coincidido en el tiempo con dos cuestiones vinculadas a la financiación, en las que llevamos trabajando desde enero de manera acelerada, como son la participación en la programación de los nuevos programas operativos (2021-2027) de Fondo Social Europeo (FSE) y el Fondo de Desarrollo Regional (FEDER)», ha concluido.
Pide más financiación para el Erasmus Rural
El rector de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), Julián Garde, ha asegurado sentir un elevado grado de satisfacción por el «éxito» que ha supuesto el programa Erasmus Rural, pero ha confesado tener «desasosiego», ya que ha habido más demanda que oferta y por falta de financiación no se han podido atender a unas 200 peticiones de las 300 recibidas. No obstante, desde el punto de vista formativo, el programa está siendo valorado de manera muy positiva tanto por estudiantes como por las instituciones y empresas receptoras, tal y como ha desgranado.
En una entrevista con Europa Press, ha recordado que la institución académica dio forma a este programa, que busca revertir la despoblación con personal cualificado, con financiación propia y con los 50.000 euros que, respectivamente, aportaron las diputaciones de Albacete, Ciudad Real, Cuenca y Toledo.
«Confiamos en sacar 60 ayudas pero hubo 300 solicitudes y 240 estudiantes se han quedado fuera, al igual que ha ocurrido con las instituciones, se adhirieron 180 y ha habido 120 a las que no hemos podido mandar a nadie y eso genera desasosiego», ha admitido.
Por ello, y ante el éxito de esta acción, la universidad ha pedido al Ejecutivo autonómico que destine una parte del contrato-programa, que está en fase de negociación, para poder dar respuesta al elevado número de solicitudes en los próximos años. «Estamos convencidos de que tienen el mismo interés que nosotros porque es un programa que lucha contra la despoblación y pretende profesionalizar el medio rural», ha recordado.
Por ello, pese a asegurar que este programa que ha arrancado este año de forma piloto tal vez se tendría que haber postergado un año, se ha mostrado convencido de que los «defectos» que se hayan dado este año se podrán corregir en la segunda convocatoria y terminará siendo «perfecto».
Impulsado desde el Vicerrectorado de Innovación, Empleo y Emprendimiento, el Erasmus Rural permite a los estudiantes de la universidad castellanomanchega completar su formación mediante el desarrollo de prácticas externas remuneradas en empresas, instituciones y asociaciones del medio rural y de localidades poco pobladas de la región, con el objetivo de facilitar el encuentro entre la oferta proveniente de los estudiantes interesados en estas prácticas y la demanda de talento proveniente de las empresas e instituciones.
Para ello, los beneficiarios recibirán una beca de 500 euros brutos al mes, y para aquellos que no residan en el municipio en el que se realiza la práctica se concederá una bolsa de ayuda de 450 euros en concepto de desplazamiento y manutención.