La Plataforma Feminista de Guadalajara ha expresado su satisfacción por la sentencia judicial que devuelve a una niña de cerca de dos años a su madre, Jeyme, de quien ha estado separada durante cinco meses debido a la «conducta unilateral del progenitor».
El auto dictado reconoce la custodia de la niña a favor de la madre y pone de manifiesto que el padre «nunca pensó en el bienestar de la menor, incumpliendo sus deberes al mantener alejadas a la niña y la madre».
Desde esta plataforma señalan que detrás de la historia de Jeyme hay una historia de maltrato físico y psicológico. «En noviembre de 2017 cesó la convivencia tras una denuncia por violencia de género que Jeyme se vio forzada a retirar bajo la coacción y amenazas de su ex de que iba a quitarle a su hija». En el comunicado hecho público subrayan que, «presionada por la situación, acordaron un régimen de visitas que además no le implicara al padre el pago de ninguna pensión, por eso el acuerdo no se ratificó en el juzgado y la guardia y custodia la ejerció la madre, haciendo el padre un uso desordenado del régimen de visitas acordado y usando este régimen para hostigarla«.
Este colectivo indica que «él ha estado amenazándola continuamente con que iba a quitarle a su hija y finalmente materializó su amenaza» el 17 de septiembre de 2018.
Después de acudir a diversas fuerzas de seguridad y a los servicios sociales recibiendo como única respuesta que no podían hacer nada, finalmente se celebró en el Juzgado de Instancia número 7 de Guadalajara la vista de medidas urgentísimas que ha vuelto a unir a ambas.
En este proceso la Plataforma Feminista de Guadalajara lamenta la falta de consecuencias para el progenitor: «no podemos entender ni compartir que se acuerde un régimen de visitas en favor del progenitor no custodio sin supervisión después de su conducta». Sostiene que «todo lo que han sufrido Jeyme y su hija durante estos meses y el abandono que han padecido de todas las instituciones pone de manifiesto lo injusto del sistema y lo indefensas que estamos ante él».
La historia de violencia machista que ha sufrido Jeyme
La tormentosa relación que ha sufrido Jeyme comenzó cuando se quedó embarazada y él quiso que abortara. «Hasta en seis ocasiones la golpeó», denuncian, pero ahí no acabó la pesadilla.
«La situación de violencia que se inició con el embarazo fue a más hasta que finalmente decidió ponerle fin presentando una denuncia por malos tratos». Explican que pese a que el hombre tiene una nueva pareja, «ha destinado su tiempo a vigilar a Jeyme, tanto a través de redes sociales como por medio del teléfono, llamándola cuando ve fotos con sus amigas y pasándose con asiduidad por el pueblo donde ella reside para difamarla».