Es una de las citas que más nerviosos pone a los pequeños de la casa, es su particular Nochevieja. Sin cenas, sin sueño y con mucha mucha energía a las doce del mediodía las Pre-uvas Infantiles llenan de vida y de alegría tradicionalmente el centro de la ciudad, paso previo para disfrutar de los numerosos vermús con los que despedimos el año.
Nueva ubicación
Este año, las obras que se están llevando a cabo en el Ayuntamiento, en la torre del reloj, han motivado que se haya tenido que trasladar la fiesta a la plaza de la Concatedral de Santa María donde, tras el reparto de cotillones entregados personalmente a los más pequeños, el grupo «Alboroto» ha cogido la batuta para despedir el año con música, bailes y una jornada la mar de entretenida. Se trata de una actividad organizada por el Ayuntamiento de Guadalajara que ha contado este año con la colaboración del Obispado.
De vermús
Acto seguido la mayor parte de las familias han comenzado la primera fase de los vermús de Nochevieja. Una cita que lleva años convirtiéndose en ineludible y que se adapta a cada tipo de persona en función de sus circunstancias, ya que vecinos de todas las edades se dividen sobre todo en la zona centro de Guadalajara para charlar, reunirse y despedir el año de una manera muy muy especial. Para ello, barras en la calle, música de DJ´s o batukadas son la manera perfecta de poder combinar la música, la diversión, las risas y el buen humor con el que decir adiós a 2024. Hasta las siete de la tarde se mantendrán abiertos momento en el que habrá que ir cambiando de escenario para que calles y plazas recobren su aspecto diario y cada uno pueda irse a cenar con sus familias en la última noche del año.