El río Aliendre no siempre lleva agua. Desde hace años, el número de veces que el río baja seco, sin agua, se ha multiplicado de manera «alarmante», como explica el Ayuntamiento de Cogolludo, localidad de Guadalajara por donde pasa este pequeño río.
En los últimos días, las lluvias se han multiplicado en la zona y han permitido que ese pequeño río seco vuelva a brotar. El pasado jueves 19 de octubre, el cielo dejó 82,3 litros por metro cuadrado en solo 24 horas, una cantidad alentadora para ese medio rural seco y falto de agua.
«Para los cogolludenses, siempre es una alegría ver que el cauce vuelve a bajar lleno de agua. Ojalá las lluvias de estos días se extiendan a todo el otoño y se transformen en nieve en invierno, para calmar la sed de la tierra», confiesa Alfonso Fraguas, alcalde de Cogolludo.
Paradójicamente, las lluvias de hace un mes, el 14 de septiembre, provocaron que en la cabecera del río Aliendre se desbordase el cauce por la abundancia de lluvias.
Las imágenes constatan cómo crece un cauce y en apenas dos minutos el agua va inundando el camino natural que ya ha trabajado en el suelo. Poco a poco, Cogolludo celebra la vuelta del río Aliendre, esperan que no sea pasajero. Este vídeo está grabado desde el puente de Torregosa, el jueves 19 de octubre.