«Izquierda Unida no va a votar a favor de este proyecto de ordenanzas fiscales que ha presentado el alcalde Emiliano García-Page porque hipoteca el futuro de la ciudad, es injusto y vuelve a favorecer a los promotores». Así se pronunciaba el portavoz de IU en el Ayuntamiento de Toledo, Aurelio San Emeterio, en una rueda de prensa que ha ofrecido para explicar la postura de su partido en referencia al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).
San Emeterio ha explicado que «Izquierda Unida ha mantenido el mismo discurso desde el inicio de la polémica en este asunto, dejando claro el origen y los responsables del problema y, sobre todo, reclamando la revisión catastral para todos, no solo para los promotores inmobiliarios».
Y ha denunciado que «el Gobierno del PP, con su rechazo absurdo a la revisión de valores catastrales -jaleada por Claudia Alonso y su grupo-, ha creado un problema que ahora debemos resolver desde el Ayuntamiento para poder garantizar los ingresos que permitan ofrecer servicios públicos esenciales para los toledanos y evitar a toda costa despidos».
San Emeterio ha explicado que «entendemos que la propuesta del PSOE de bajar el tipo al mínimo (0,40) no es adecuada; favorece a los de siempre, no baja los recibos e hipoteca el futuro», y lo ha argumentado explicando que no aborda el problema fundamental: el valor catastral; cCon la reducción general del tipo al 0,40 premia a los grandes promotores cuyo IBI ya se verá rebajado con la revisión catastral de sus terrenos; no supone rebaja en el recibo de la mayoría de los ciudadanos; y además, al dejar el tipo al mínimo, cierra la posibilidad de bajar el IBI en años posteriores. «En 2015, si no hemos conseguido una revisión catastral general, subiría nuevamente el IBI».
El objetivo de Izquierda Unida sigue siendo «una revisión del valor catastral justa para todos, una reducción, aunque sea leve, del recibo del IBI y mantener el nivel de ingresos necesario para mantener servicios y empleo en el Ayuntamiento». Han resumido su propuesta en solicitar al Ministerio la aplicación del coeficiente reductor del 27 por 100 a los valores catastrales -«no es la revisión a la que aspiramos, pero es mejor que dejarlo como está; eso ya beneficia a los vecinos»-; modular el tipo, previo estudio e informe técnico, para que los recibos de los toledanos tengan una bajada, aunque sea leve, en lo que pagan y que la pérdida de ingresos no suponga dejar de prestar los servicios públicos esenciales ni conlleven despidos; y seguir exigiendo al Gobierno del PP una revisión colectiva de los valores catastrales, «cuyo rechazo es político y carece de criterios técnicos y que cese de una vez el acoso a los ayuntamientos».