sábado, 19 de octubre de 2024
18/06/2013junio 12th, 2017

El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Toledo, Aurelio San Emeterio, ha puesto de manifiesto que «Toledo tiene capacidad para desarrollar un modelo económico verde y sostenible que, además de suponer un ahorro y una gestión eficiente de nuestros recursos, genere empleo y actividad económica. Para nosotros no es solo una oportunidad, es la única vía responsable y seria para buscar otro modelo».

San Emeterio ha explicado que Izquierda Unida mantiene esa idea como línea de trabajo en la ciudad y que «asumimos como propia la obligación de ser una oposición útil que, además de su papel de vigilancia y crítica al gobierno, haga propuestas viables y positivas para Toledo».


En ese sentido, San Emeterio ha anunciado que su formación va a solicitar que el Ayuntamiento se incorpore al Proyecto Elena 1 (European Local Energy Assistant) a través de la Federación de Municipios y Provincias. El portavoz de Izquierda Unida ha explicado que el Proyecto Elena «es un instrumento de asistencia para ayudar a entidades locales y regionales en el sector de la energía; ofrece ayuda técnica y financiera para proyectos en materia de energía sostenible y puesta en marcha de inversiones en materia de eficiencia energética y renovables. El pasado 28 de mayo la FEMP en Castilla-La Mancha aprobó iniciar las actuaciones para su implantación, así que sería una irresponsabilidad dejar pasar oportunidades como esta». San Emeterio ha insistido en que «este proyecto permite realizar inversiones a coste cero para el ayuntamiento que se adhiera al mismo y supone además importantes ahorros en la facturación energética».

San Emeterio ha detallado que Izquierda Unida ha tenido que volver a insistir al equipo de gobierno para que el alcalde «asuma de una vez la idea de Toledo como generador de energía y como ciudad sostenible», y lo ha hecho presentando de nuevo una propuesta para la creación de un grupo de trabajo que «se ponga ya a establecer medidas de ahorro energético, generación de energía y la creación de una ordenanza que facilite las instalaciones térmicas y fotovoltaicas en el municipio. Se aprobó por unanimidad en el último Pleno, así que confío en que no acabe (otra vez) en el cajón del alcalde. De momento hace un mes de su aprobación y aún no se ha puesto a trabajar». «Tenemos la obligación y la capacidad de desarrollar una economía verde que genere empleo y actividad económica». 

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