Un frente asociado a la borrasca atlántica ‘Jorge’, situada en el entorno de Irlanda, dejará desde última hora de este viernes tiempo adverso -con lluvia, viento, oleaje y caída de las temperaturas- en el noroeste, que se generalizará el fin de semana para recibir marzo con ambiente más propio de la época.
«Se trata de un cambio de tiempo radical que para nada nos indica que el invierno ha terminado», ha subrayado a EFE Fernando García, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), quien ha insistido en que, tras semanas de estabilidad por el persistente anticiclón «que nos ha dejado un ambiente poco habitual», esta borrasca «asegura la lluvia y concede un atisbo de esperanza».
De hecho, este viernes la Aemet ha activado avisos de nivel naranja -riesgo importante- en el litoral atlántico de Galicia por oleaje y fuerte viento, y en la zona de Liébana (Picos de Europa), donde se esperan rachas superiores a los 100 kilómetros por hora.
Temperaturas en ascenso en muchas provincias de CLM
También la calima es hoy un fenómeno destacado en buena parte del interior de la península «tras abandonar Canarias por la configuración de vientos que trae este frente», aunque «tan sólo dejará los cielos algo turbios y reducirá ligeramente la visibilidad», ha señalado el portavoz.
Y los termómetros vuelven a ascender en buena parte de España, hasta los 24 grados en Almería y Granada, 23 en Badajoz, Murcia, Santa Cruz de Tenerife y Zaragoza, y por encima de 20 en Albacete, Alicante, Bilbao, Castellón, Ciudad Real, Cuenca, Jaén, Lleida, Málaga, Las Palmas, Teruel y Valencia, mientras que la mínima más baja la registra Teruel, con un grado negativo.
La borrasca ‘Jorge’, que se mueve hacia los países escandinavos, será la responsable del cambio esperado de tiempo a partir de mañana, último día de febrero, en que el frente dejará precipitaciones y vientos fuertes en Galicia y se desplazará hacia el este, con un aumento generalizado de la nubosidad en la península y Baleares, mientras que Canarias quedará bajo el régimen de alisios.
Desplome de entre 4 y 5 grados en las mesetas
Las lluvias se extenderán por Pirineos y vertientes cantábrica y atlántica, las temperaturas máximas se desplomarán «entre 4 y 5 grados de media en ambas mesetas para acercarse a valores normales» y se mantendrán de momento en las regiones mediterráneas, donde «incluso subirán 2 o 3 grados para acumular anomalías entre 5 y 7 grados», mientras que los vientos soplarán con rachas muy fuertes en el noroeste peninsular y áreas montañosas.
Los avisos de nivel naranja afectan el sábado a los litorales atlántico y cantábrico, donde se esperan olas de 5 a 6 metros, y al interior de Galicia y Picos de Europa, donde soplarán rachas de viento superiores a 100 kilómetros por hora.
«El debilitamiento progresivo del anticiclón creará una especie de calle para la entrada de sucesivos frentes», que dejarán lluvia en amplias zonas del país, ha explicado Fernando García, si bien «existe mayor incertidumbre a medida que avanza la predicción semanal».
Así, el domingo un sistema frontal recorrerá la península y Baleares de oeste a este con características similares al sábado, aunque con precipitaciones más generalizadas en la vertiente atlántica e intensas, especialmente en Galicia, donde pueden ser persistentes y localmente fuertes, y la nieve aparecerá en cotas medias -1.000 a 1.200 metros- de los sistemas montañosos del norte.
Una nueva borrasca atlántica «muy activa» atravesará el lunes el tercio norte peninsular de oeste a este y se situará al final del día en el entorno de Baleares, dejando a su paso lluvias generalizadas, excepto al sur del Ebro, que podrían ser persistentes y/o localmente fuertes y con tormentas en Galicia, Cantábrico y los principales sistemas montañosos, nevadas significativas en las montañas del centro y norte, temperaturas claramente a la baja y viento fuerte en amplias zonas de la península y Baleares,
A partir del martes, los frentes seguirán afectando a la mitad norte peninsular, pero con precipitaciones en general débiles, más probables cuanto más al norte, más intensas en Galicia y en forma de nieve en la cordillera Cantábrica y Pirineos, mientras que en la mitad sur y área mediterránea serán poco probables hasta el fin de semana.