Antes de la pandemia, a la localidad de Tamajón, como a otras muchas zonas rurales de España, las entidades bancarias se desplazaban para dar servicio a la población en pequeñas sucursales o en unidades móviles. La entidad bancaria enviaba un trabajador dos días a la semana, martes y jueves, en horario de 9 a 14 horas para atender a las necesidades de los vecinos de esta comarca de la Sierra Norte de Guadalajara. Con la crisis sanitaria, la entidad bancaria dejó de enviar al trabajador, por lo tanto, tan solo quedó como recurso, el cajero automático en Tamajón para servir a toda la zona. Con la evolución de la pandemia volvieron a enviar un trabajador pero esta vez solo una vez a la semana.
Por lo tanto, para conseguir dinero en efectivo en toda la comarca, los vecinos y turistas tenían que acudir al cajero automático de Tamajón o acudir el único día a la semana que el operario del banco acudía al municipio.
El fin del cajero automático tenía fecha
El mes de septiembre de 2021, los responsables de la entidad bancaria se pusieron en contacto con el Ayuntamiento de Tamajón para comunicarles que desde enero de 2022, el banco había decidido retirar el servicio de cajero automático en la localidad. Por si fuera poco, antes de llegar esa fecha, el cajero se averió y no ha habido intención alguna de repararlo.
Por lo tanto, Tamajón y comarca ya no disponen de cajero automático, perdiendo así otro servicio público más en una zona gravemente afectada por la despoblación y que lucha cada día por no perder los derechos de sus habitantes que no quieren convertirse en ciudadanos de segunda categoría.
El Ayuntamiento tiene la intención de cubrir los costes del arreglo
El consistorio tenía la intención de cubrir los costes de la avería, con el objetivo de no perder otro servicio más, pero desde la entidad bancaria respondieron que no se trata solo de la reparación o sustitución del mismo, sino que el mantenimiento del servicio es deficitario y no estaban dispuestos a continuar prestándolo, a pesar de los más de 15.000 euros que el ayuntamiento estaba dispuesto a poner sobre la mesa.
«Tamajón ha estado en buena disposición para aportar lo que hiciera falta con tal de que sus vecinos no se quedara sin un servicio que consideramos fundamental, pero cuando por parte de los responsables del mismo no existe voluntad es muy difícil luchar por los derechos de los ciudadanos de la comarca», asegura Eugenio Esteban, alcalde de la localidad.
Asegura también que esa desaparición afecta no solo a los vecinos de la comarca y trabajadores, sino a miles de turistas que visitan la zona cada año. Si nadie pone remedio, tendrán que desplazarse hasta Humanes o Cogolludo para conseguir dinero en efectivo.
Grupos de acción de desarrollo rural y alcaldes de la zona han presionado
A pesar de los esfuerzos de alcaldes y concejales de muchos municipios, de los grupos de acción de desarrollo local, de los foros contra la despoblación y de otras muchas iniciativas que tienen como objetivo luchar contra la España vaciada, cada uno de los pequeños servicios que desaparece y que en otros lugares podrían pasar inadvertido, es una batalla perdida más contra la despoblación de zonas rurales con una gran riqueza natural y cultural, pero que se ven abocadas a la pérdida de población, entre otros motivos, por la pérdida constante de servicios fundamentales.
Esteban, por el momento, no se da por vencido y sigue reclamando derechos para sus vecinos, «Desde el ayuntamiento también nos hemos dirigido a la Diputación de Guadalajara para pedirles su ayuda al respecto, pero aún así, nos sentimos solos en la lucha en la que si no tenemos apoyo de otras administraciones nos vemos abocados a seguir perdiendo derechos».
Tamajón y comarca
La pequeña localidad de Tamajón se encuentra a menos de una hora del conocido pico Ocejón, y a escasos kilómetros de bellos municipios que se guardan bajo la denominación de los Pueblos negros de Guadalajara, así como Campillo de Ranas, Majaelrayo, El Espinar o Valverde de los Arroyos.