La estación de autobuses de Toledo, que gestiona el Ayuntamiento de esta capital, será traspasada a la Junta de Castilla-La Mancha el uno de enero de 2014 y las ocho personas que ahora trabajan en ella serán recolocadas en el Ayuntamiento mediante un «proceso de funcionarización».
Así lo ha anunciado el portavoz del equipo de Gobierno municipal, Rafael Perezagua, quien ha explicado que el pasado 20 de agosto recibieron un escrito de la Viceconsejería de Fomento, en el que se ponía de manifiesto que la Junta «no tiene inconveniente» en acordar la resolución de la concesión, siempre y cuando se cumplan las obligaciones preceptivas.
El Ayuntamiento de Toledo está asumiendo desde 1986 una «competencia impropia», ha dicho Perezagua, quien ha recordado que las competencias en materia de transportes las tiene el Gobierno regional. La Junta atiende así a una petición formulada a la Consejería de Fomento por el consistorio hace unos meses y que se acordó dentro del plan de ajuste municipal.
El traspaso de esta concesión permitirá al Ayuntamiento un ahorro de unos 350.000 euros, de los 600.000 que le cuesta cada año al consistorio.
Una comisión mixta entre técnicos de ambas administraciones se constituirá para perfilar los detalles del traspaso de la estación de autobuses y concretar todos los aspectos relativos a los locales comerciales y empresas concesionarias del mantenimiento y limpieza de estas instalaciones.
Sobre las ocho personas que trabajan en la estación con cargo al Ayuntamiento de Toledo, seis de ellas como personal laboral, Perezagua ha indicado que se abrirá un proceso de funcionarización y serán recolocados en distintas dependencias municipales, tal y como se acordó en su día con los sindicatos y en cumplimiento del pliego de condiciones establecido en el contrato de concesión firmado en su día.