El consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha afirmado que la situación de la Comunidad de Madrid, «con el nivel de contagio más alto, ha influido en la decisión que ha adoptado el Ministerio de Sanidad sobre las provincias de Castilla-La Mancha», justo después de conocer que solo dos de las cinco provincias de la comunidad autónoma, Cuenca y Guadalajara, las dos menos pobladas, han pasado a la fase 1 de la desascalada, mientras que las otras tres, Toledo, Albacete y Ciudad Real, las más pobladas, se quedan en la fase cero y tendrán que esperar al menos una semana más para subir.
Fernández Sanz ha señalado que el trabajo realizado hasta ahora «nos hace pensar en que estas tres provincias pasarán a la fase 1 el próximo 18 de mayo», y ha señalado que están «moderadamente satisfechos con la decisión, porque asumimos el carácter más conservador que el Ministerio de Sanidad nos ha propuesto y seguimos luchando para vencer a este maldito virus».
Porque, ha insistido, «lo que pretene el Ministerio es asegurar el futuro. Los datos de contagios en CLM, a fecha de hoy, son muy buenos. Quiero decir que es un nivel óptimo para trabajar en el momento en el que nos encontramos, pero no es bueno si pensarmos que tiene que ser cero. Nos han pedido datos de días más atrás para ver las posibilidades de futuro, y eso es lo que ha hecho pensar en el conservadurismo del Ministerio».
Aun así, «no vamos a levantar el pie del acelerador y vamos a seguir insistiendo en que se sigan cumpliendo las normas en las cinco provincias de la región. Por eso sigo insistiendo en que haya mucha responsabilidad en la distancia física y social, mucha responsabilidad en las medidas higiénicas como el uso de mascarillas y el lavado de manos, y que no haya contacto físico. Pasaremos esta semana y el 18 estaremos todos en la fase 1, por eso no nos vamos a relajar».
«Va mejorando mucho la capacidad asistencial en CLM, hay 145 respiradores libres»
También se ha referido a la capacidad asistencial que hay en la actualidad en los centros hospitalarios de la región, «va mejorando mucho, ahora mismo tenemos 145 respiradores libres y otros 350 más dispuestos para trabajar en cualquier momento».