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EDUCACIÓN UNIVERSITARIA 03/09/2015junio 8th, 2017

La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha mantenido prácticamente el mismo número de estudiantes que han cursado estudios en las diferentes facultades de la institución académica durante los últimos seis años.

Así se desprende de los datos que ha aportado la Estadística de Estudiantes Universitarios correspondiente al curso académico 2014-15, hecha pública recientemente por el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes.


La UCLM ha mantenido en estos años una matrícula estructural prácticamente constante, con 26.327 estudiantes en el curso 2008-2009, 460 más que en el pasado curso académico, cuando se alcanzaron 25.867 estudiantes.

En el conjunto de universidades públicas presenciales, el balance final ha sido de 1.166 estudiantes matriculados más después de seis años, equivalente a una variación de apenas el 0,10 por ciento.

Destacan los incrementos de estudiantes universitarios en Andalucía (11.307), Cataluña (8.197) y Murcia (2.480), seguido de otro de grupo de regiones, en el que se encuentra Castilla-La Mancha, que básicamente mantiene posiciones, junto a Navarra, Madrid, Cantabria, Aragón y Valencia con oscilaciones inferiores al 2 por ciento.

Un tercer grupo experimenta caídas más acusadas: 5.913 en Galicia, 3.288 en Asturias, 2.670 en Castilla y León, 2.479 en Canarias, 1.677 en Extremadura, 1.619 en La Rioja y 1.010 en País Vasco.

CONCLUIDO EL PROCESO DE BOLONIA

Estos datos se han dado a conocer después de que el curso académico 2014-15 haya sido el primero después de seis años en la universidad española en el que los estudiantes han realizado su matrícula en un marco estable, una vez concluido el denominado proceso de Bolonia iniciado en el curso 2008-09.

Este proceso supuso múltiples cambios en la estructura y duración de las enseñanzas universitarias, los cuales influyeron considerablemente en el número de estudiantes matriculados en las universidades españolas.

Así, por ejemplo, las antiguas licenciaturas e ingenierías superiores pasaron de 5 a 4 años, con la consiguiente pérdida de un curso completo de estudiantes matriculados, mientras que las antiguas diplomaturas e ingenierías técnicas pasaron de 3 a 4 años, con el efecto contrario al anterior sobre los estudiantes matriculados al añadirse un curso completo.

La Estadística de Estudiantes Universitarios muestra que los cambios en la duración de las enseñanzas universitarias concentraron sus efectos positivos en los tres primeros cursos académicos del proceso (2009-10, 2010-11 y 2011-12) al cambiar los títulos universitarios de 3 a 4 años de una única vez, mientras que los efectos negativos sobre la matrícula se retrasaron para hacerse notar en los tres últimos cursos del proceso (2012-13, 2013-14 y 2014-15) al cambiar los títulos de 5 a 4 años de manera progresiva en el tiempo.

Una vez concluidos estos procesos de implantación del proceso de Bolonia, el balance final es prácticamente neutral en su conjunto.

Las universidades públicas presenciales ganaron 31.655 estudiantes en el primer año del proceso Bolonia, 25.761 en el segundo y 21.450 en el tercero, mientras que perdieron 20.404, 20.075 y 37.221 en el cuarto, quinto y sexto.

La UCLM presenta un perfil similar al resto de universidades públicas presenciales, acumulando subidas los tres primeros años del proceso Bolonia de 994, 937 y 314 estudiantes matriculados, y un descenso los tres años finales de 188, 678 y 1.839, con la única particularidad de que el descenso del cuarto año fue más suave mientras que el descenso del sexto y último año fue más pronunciado, por diferencias respecto al proceso de adaptación elegido.

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