Por segundo año consecutivo la Intervención General de la Administración del Estado ha denegado el informe de auditoría de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) al considerar que no puede hacerse una imagen fiel acerca de lo que pasa en este organismo dependiente del Ministerio de Transición Ecológica. Así lo publica hoy el diario Expansión en un reportaje en el que sostiene que la sociedad no tiene un correcto control sobre la titularidad de sus bienes, las obras que realiza o los inmuebles que cede.
Según los auditores del Estado sus cuentas arrojan «demasiadas incógnitas». Destaca que desde 2012 la empresa viene haciendo un inventario de sus activos, infraestructuras y terrenos en el que sigue sin haber una metodología clara de la titularidad de los bienes, las expropiaciones realizadas o las inscripciones catastrales. También que la CHT ha venido apuntándose en su contabilidad infraestructuras que ha ido entregando gratuitamente a las comunidades autónomas y que ha ido dando de alta proyectos en los que decide trabajar, al margen de si las obras se llevan a cabo o no.
Tal y como publica el diario Expansión, existen otras deficiencias de «control interno», como aquellas referidas a los inmuebles que la confederación tiene cedidos a trabajadores o a otras personas o la imposibilidad de comprobar la correcta liquidación del importe que la CHT debe recibir por el canon hidráulico.
Después del cambio de Gobierno en La Moncloa, el actual presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo es Antonio Yáñez, en sustitución de Juan Carlos de Cea.