Alrededor de 400 niños saharauis están pasando los meses de julio y agosto con familias de las cinco provincias de Castilla-La Mancha, gracias al proyecto ‘Vacaciones en paz’ que promueve la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui.
Según ha explicado a Efe el delegado adjunto en Castilla-La Mancha del Frente Polisario, Abdelahe Ahamed, el programa comenzó hace 20 años y acoge todos los veranos a niños con edades comprendidas entre los ocho y doce años que conviven con familias de la región.
Los billetes de avión que trasladan a los niños a España están subvencionados por instituciones, entre ellos la Diputación de Ciudad Real y los ayuntamientos de las localidades de acogida, y con dinero recaudado por las asociaciones de ayuda al pueblo saharaui.
Estos niños provienen de los campamentos de refugiados saharauis situados al suroeste del desierto de Ruc, en Argelia, donde viven con temperaturas de 40 grados a la sombra en verano y temperaturas muy frías durante el invierno.
Ahamed ha dicho que se trata de «una experiencia muy importante para los niños», ya que les permite conocer que hay pequeños que gozan de un bienestar que ellos no tienen porque «alguien les ha privado de ello», ha opinado.