El director Fernando Merinero y su equipo ruedan estos días, hasta el 26 de julio, el film «Haz de tu vida una obra de arte», en la que participan los actores Ramón Merlo, la toledana Valle Hidalgo, Luis Hostalot, Sandra Marchena, Aitor Merino, Isabelle Stoffel, Enrique Alcides y Daniela Costa.
El castillo de San Servando está siendo durante este tiempo de rodaje escenario de horas y horas de grabación. Allí transcurre prácticamente toda la acción, si bien Merinero se plantea tomar algunas secuencias fuera del mismo, por las calles del Casco Histórico.
En este marco se cuenta la historia de ocho personajes muy peculiares y diferentes entre sí que acuden a un seminario de superación personal. Como siempre pasa, allí se mezclan personas honradas y buenas con otras que solo buscan aprovecharse de los demás.
Merinero afronta así el tema de las relaciones personales y de cómo las relaciones interpersonales ceden terreno a la comunicación on line hasta el punto de conducir a una cierta deshumanización. Siempre en tono de comedia, aflorarán los conflictos relacionados con el amor, la pasión, la necesidad…
El castillo de San Servando «es un personaje más». En esta localización ha tenido mucho que ver la actriz toledana Valle Hidalgo, también en que Fernando Merinero esté redescubriendo Toledo y es que, como madrileño que es, siempre ha conocido la ciudad en fugaces escapadas a los lugares más conocidos.
Después de cerca de cuatro meses en la capital regional, «ya soy casi toledano de adopción». Confiesa que está encantado con esta «ciudad tranquila y cargada de historia» de la que destaca sus «rincones con encanto».
Todo ha sido hospitalidad en Toledo, también por parte del hotel Fontecruz (Palacio Eugenia de Montije) en el que se alojan los miembros del equipo.
Nacido en Madrid en 1958, Fernando Merinero se licenció en Derecho por la Universidad Complutense en 1982. Posteriormente, estudió cine y teatro en el Taller de Artes Imaginarias (TAI) con maestros como Miguel Picazo, Antonio Drove o Alberto Miralles, así como un Máster en escritura de guiones cinematográficos en la Universidad Autónoma de Madrid.
A lo largo de su carrera ha trabajado como director, actor, productor, guionista y montador. Ha dirigido cortometrajes como «Raíles de sangre» (1990) o «Háblame bajito» (2006). Su paso al largometraje se produjo con «Los hijos del viento» (1995), donde, además de guionista y director, desempeñó uno de los papeles protagonistas. Desde entonces, no ha parado de dirigir films de larga duración como «Agujetas en el alma» (1997); «Casting» (1998), primera película española rodada en vídeo digital; «La novia de Lázaro» (2002), o «Un millón de amigos» (2007). En 2006 dirigió el documental «Las huellas de Dylan», centrado en una gira del cantautor americano por España.
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