El ganadero taurino José Javier Núñez Cervera ha advertido hoy que el número de festejos taurinos ha bajado alrededor del 50 % por la crisis en todo el país, pero «el toro de pueblo, el de base, en las plazas de tercera, ha bajado hasta un 67 %».
Núñez Cervera ha participado en una mesa redonda sobre la repercusión económica del sector taurino, en el marco del I Congreso Internacional de Tauromaquia que hoy se ha clausurado en Albacete.
Ha avisado de los riesgos de ese descenso en el número de festejos «porque es en los pueblos donde se hace afición y de donde salen las figuras del toreo».
Núñez Cervera ha defendido que «nuestro impacto económico es de enorme relevancia» y ha detallado que «sólo en IVA, generamos más facturación que el teatro o el cine».
Ha indicado que la situación de crisis de la feria es «correlación directa» de la situación económica que vive el país, pero ha pedido al sector «analizar qué hemos hecho mal para perder tanto en el toro de base» y ha lamentado que «seguimos con el modelo económico de hace años, cuando no había IVA o impuestos directos», por lo que ha instado a buscar soluciones conjuntas.
El catedrático de economía aplicada José María O’Kean también ha intervenido en esta mesa redonda y ha advertido a los empresarios del sector que deben tener claro lo que quieren: «si intentáis sobrevivir, escondeos ante un mundo cada vez más crítico que se os viene encima» o si, por el contrario, «pretendéis dinamizar la fiesta».
Les ha recomendado ir «a un modelo de patrocinio, porque con la taquilla no se cubren gastos».
«Es un espectáculo que la entrada no cubre los costes, pero esto pasa también en la ópera o el tenis», ha dicho O’Kean, que ha puesto a los empresarios taurinos como ejemplo la fórmula del tenis en la que «los cuatro mejores siempre juegan en las grandes competiciones» pero se reservan plazas para todas las categorías.
Ha reconocido que esas fórmulas no serían fáciles, necesitarían del consenso de todos, pero servirían para dinamizar el sector.
El ganadero albaceteño Samuel Flores ha puesto como ejemplo de lo «mucho» que el mundo del toro sirve para la economía de una ciudad «que la Feria Taurina de Albacete genera una cifra de negocio de seis millones de euros».
«El impacto económico del sector es indudable», ha destacado Samuel Flores que ha apostado también por «buscar fórmulas» para que la afición siga encontrado atractivo «este arte».
En otra mesa redonda, expertos como el catedrático François Zumbiehl han insistido en la «necesidad» de lograr que la Unesco declare la tauromaquia como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad para «garantizar» la continuidad del sector.
También Williams Cárdenas, abogado y presidente de la Asociación Internacional de Tauromaquia de Venezuela, se ha pronunciado en la misma línea y ha subrayado que «debe haber tratados internacionales que garanticen la supervivencia de esta fiesta».
Por ello, Cárdenas ha pedido que haya una segunda edición de este congreso y que se celebre en Iberoamérica para «buscar» el compromiso de todos los países donde la tauromaquia tiene presencia.
Y el político británico Tristan Garel-Jones ha profundizado en la idea de «plantar cara» a la globalización para evitar que ello afecte al futuro de la tauromaquia.