Con el lema «La cualidad de ser diferente, no invisibles», desde la Federación de dislexia de Castilla-La Mancha, Disclam, y en concreto, desde Distolexia, como asociación provincial toledana perteneciente a esta entidad, con motivo del Día Internacional de la Dislexia, se pide la colaboración de la sociedad con diferentes iniciativas para concienciar de las barreras a las que se enfrentan las personas con esta Dificultad Específica de Aprendizaje (DEA) de origen neurobiológico.
Se caracteriza por la presencia de dificultades en la precisión y fluidez en el reconocimiento de palabras escritas y por un déficit en las habilidades de decodificación lectora y deletreo, y como consecuencia presentan dificultades en la velocidad y comprensión lectora.
¿Qué podemos hacer para concienciar sobre la dislexia?
Distolexia propone las siguientes iniciativas para
- Iluminación de AZUL TURQUESA de algún edificio o espacio representativo de su ámbito territorial. (Visibilizar)
- Imprimir nuestro cartel (que adjuntamos el correo) y exponerlo en un lugar visible para su difusión. (Visibilizar)
- Colaborar en la difusión del manifiesto.
- Taller de lectura, sensibilización, leer a los niños y/o adolescente o que visualicen alguno de estos cuentos y videos cuyos protagonistas son personas con Dislexia y el poder de la inclusión:
Manifiesto del Día Internacional de la Dislexia
A continuación reproducimos, íntegramente el manifiesto enviado por Distolexia.
«El 8 de octubre es un día muy importante para todas las personas como yo, es el Día de la Dislexia, una dificultad de aprendizaje que afecta aproximadamente a un 10 por ciento de la población, lo que significa que casi uno de cada diez alumnos tiene esta dificultad.
Las personas con dislexia que estamos en edad escolar, tenemos la suerte de poder dedicar al menos 10 años de nuestra vida, a aprender cómo es el mundo que nos rodea y a prepararnos para ser personas respetuosas, con capacidad crítica y con la difícil tarea de poder buscar soluciones a un futuro incierto.
Para ello, nos dirigimos todos los días al colegio o al instituto para aprender y estar con nuestros compañer@s, pero nuestro día a día es mucho más complicado para algunos de nosotros porque toda gira en torno a la lectura y la escritura, nuestras mayores dificultades.
Dislexia, dificultad al leer o escribir
La dislexia es una dificultad a la hora de leer, de escribir y por tanto de aprender, que a veces va acompañada de otras dificultades de aprendizaje como la discalculia., disortografía, disgrafía….
Para nosotros es especialmente frustrante cuando las barreras que nos encontramos en el entorno escolar nos impiden tener la misma rapidez y precisión que nuestr@s compañer@s.
¿Te imaginas que, si fueras miope, te pidieran leer un libro o un cartel que está lejos, sin tus gafas?
Daría igual las veces que te lo pidieran, que te castigaran, te hicieran repetir (incluso de curso) o las veces que te llamaran vago por no “querer” leerlo o escribirlo.
Somos INVISIBLES
Las personas disléxicas, como yo, os aseguramos que no es que “no queremos” es que “no podemos” sin unas “gafas” especiales. Nuestras gafas se llaman adaptaciones de acceso y metodológicas y con ellas se derriban las barreras que nos impiden aprender en igualdad o equidad al resto de nuestros compañer@s. Y las necesitamos durante toda nuestra vida, incluida la Universidad o incluso si pretendemos opositar algún día.
Pero sin ellas…. todo es mucho más difícil, y a veces nos vemos abocados incluso al fracaso escolar, con todo lo que conlleva.
Nuestras “gafas” son INVISIBLES, COMO NOSOTROS.
Ya que nuestra dificultad solo se puede apreciar si desterramos las etiquetas de “vagos”, de que” no nos gusta leer”, que “no nos esforzamos lo suficiente “… que muchas veces escuchamos en nuestras familias y por parte de nuestros profesores.
Pero también somos INVISIBLES para la Administración, ya que los centros educativos están saturados, para poder atender toda la diversidad de necesidades que hoy existe en nuestra sociedad, con unos recursos que son insuficientes. Y además NO recibimos becas ni ayudas, para poder compensar esta dificultad con estrategias específicas que nos ayuden a superar las barreras que la lectura y la escritura significan para nosotros.
El problema de ser INVISIBLES y de que se nos pidan unos esfuerzos extras, para los que las personas disléxicas no estamos preparados, es que nuestra autoestima se va haciendo cada vez más pequeñita, ¿Será verdad que no soy capaz? ¿Será verdad que soy un vago? ¿Será verdad …? Pues si me lo repiten continuamente…. será verdad que “soy un tonto o una tonta” y “quizás soy incapaz de leer y aprender”.
Por suerte para mí, yo sé que eso no es verdad, que somos valios@s y que podemos aprender los mismos contenidos que el resto de los compañeros, solo necesitamos las adaptaciones adecuadas y que se respeten nuestros ritmos.
Yo lo sé, porque desde hace unos años he tenido la suerte de acudir a una de las muchas asociaciones de Dislexia que hay en Castilla la Mancha y que intentan borrar esas etiquetas que ya llevan muchos de mis compañeros. Algunos de ellos…. incluso han dejado de “querer aprender” y ven los libros como sus peores enemigos, en vez de como puertas abiertas a mundos desconocidos, reales o imaginarios.
Peticiones
Con esta carta solo quiero pedir que:
1 Los docentes y las familias necesitan formación específica, de calidad y actualizada para entender nuestra dificultad y poder ayudarnos a superarla.
2 La detección temprana sea una realidad y no haya que esperar al fracaso para ser tomados en cuenta (si es que alguna vez dejamos de ser invisibles)
3 Una intervención adecuada a nuestras necesidades. Para que las adaptaciones metodológicas y de acceso, y la adecuación a nuestros ritmos, sean una realidad, no solo un derecho que nos ofrecen las Leyes, pero que se pierde en el camino a las aulas.
¿Nos ayudas a dejar de ser invisibles? Contamos contigo»
Distolexia, Asociación de personas con Dislexia y otras dificultades de aprendizaje de Toledo.