Un total de 529 alumnos de grupos de emergencia, como bomberos, policías locales y voluntarios de las agrupaciones de Protección Civil de Castilla-La Mancha han recibido este año formación sobre reanimación cardiopulmonar en los trece cursos que ha impartido la Junta de Comunidades.
En un comunicado, la Junta ha destacado que la reanimación cardiopulmonar (RCP) es un procedimiento de emergencia para salvar vidas que se practica a aquellas personas que han dejado de respirar o cuyo corazón ya no palpita debido a diversas causas como una descarga eléctrica, un ataque cardíaco o un ahogamiento.
Por este motivo, la RCP es una de las maniobras básicas de salvamento que se abordan en la Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha, perteneciente a la Consejería de Presidencia y Administraciones Públicas.
Así, tanto policías locales como bomberos y voluntarios de las agrupaciones de Protección Civil de la comunidad autónoma son formados todos los años en esta práctica de emergencia.
En total, este año 529 personas han aprendido a realizar esta técnica de reanimación vital, tanto en adultos como en niños.
Estos cursos han sido impartidos por personal sanitario especializado perteneciente al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), que en colaboración con la Dirección General de Protección Ciudadana, consiguen que el personal de emergencia no sanitario adquiera los conocimientos básicos necesarios para mantener viva a una persona.
Un ejemplo de la utilidad de estos cursos se produjo hace dos semanas, cuando un policía local de Fuensalida salvó la vida un bebé, aplicándole la RCP hasta su traslado al centro de salud de la población.