El portavoz de Ganemos Toledo, Javier Mateo, ha afirmado que la ciudad ha reparado una deuda pendiente con los 223 fusilados por el franquismo, enterradas en 20 fosas del recién «dignificado» «Patio 31» del cementerio municipal, un homenaje con el que se ha buscado recuperar la memoria histórica.
Así lo ha declarado en el acto donde han estado los familiares de los víctimas, quienes han podido oír los nombres de todos los fusilados, y que ha organizado Ganemos Toledo este domingo con motivo de la conmemoración del 88 aniversario de la II República, ha informado en una nota pública.
Este homenaje de recuerdo, ha señalado Mateo, «es, sobre todo, una cuestión de justicia, para resarcir la deuda que la historia tiene con ellos» por haberlos asesinados dos veces, «una en la tapia de este mismo cementerio y la otra a lo largo de todos estos años en los que sus sepulturas han estado dejadas y abandonadas».
Ha enumerado los avances alcanzados, como la eliminación del callejero fascista, la retirada de placas y la dignificación del «Patio 42», y ha añadido que esta celebración es «otro paso en el trabajo de recuperar la memoria, dignificar a nuestros muertos y reparar en parte la tragedia de sus familias».
Mateo ha añadido que la dignificación del «Patio 31», así como el «42», ha sido posible gracias al apoyo de todos lo que «hace cuatro años hicieron que Ganemos Toledo pudiera entrar en el Ayuntamiento y formar Gobierno» y ha confiado en que «la próxima Corporación no olvide los patios ’17’,’19’ o ’43’ que aún quedan por dignificar».
Y de cara a las próximas elecciones ha pedido «estar en alerta ante los intentos neofascistas de involución democrática y los ataques al feminismo, a la libertad de expresión, a la propia recuperación de la memoria» y ha lanzado, por ello, una enérgica llamada a la acción: «Salgamos todas a votar y démosles una lección», ha incidido.
Por último, ha agradecido el trabajo de «los que nos precedieron en el Ayuntamiento y a los que hoy se han volcado documentando, estudiando y hablando con familiares», en particular a la historiadora Nati Rodrigo, al archivero municipal Mariano García y a «mi infatigable compañera Carmen María Duarte«.
Carmen Gómez, familiar de uno de «una de las víctimas del franquismo”, asesinado de un tiro en la cabeza el 22 de julio de 1941 y enterrado en una fosa común junto a 20 personas más en el «Patio 31», tras estar encarcelado un año en la cárcel de San Bernardo de Toledo, ha tomado la palabra para recordar a su abuelo Florencio.
«Víctima del régimen franquista, nacido en Añover de Tajo, que trabajó de jornalero en el campo, era buena persona y mejor padre, y su único error fue estar al lado del Gobierno elegido democráticamente y presidente del comité de su pueblo», ha relatado.
Muy emocionada, Gómez ha denunciado como este domingo, 79 años después, «el pacto de silencio y la Ley de Amnistía siguen protegiendo la dictadura franquista y olvidando e ignorando a sus víctimas».