sábado, 23 de noviembre de 2024
28/02/2012junio 14th, 2017

¿Será Emiliano García-Page un miembro más del Gobierno de María Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha? La respuesta a esta pregunta es más compleja de lo que parece y la da Rafael Perezagua, el portavoz del equipo de gobierno del alcalde de Toledo en la entrevista que mañana publicaremos íntegra en portada de encastillalamancha.es.

Fue el elegido por Page para cocinar el plato más delicado de su primera legislatura, el pacto con IU, que lejos de convertirse en un estigma para los socialistas fue un asunto más al que sacar rentabilidad política. Vive la vida del partido y es un hombre experimentado en todos los niveles de la administración pública, un clásico en la línea de vanguardia que se monta el alcalde cuando vienen mal dadas. El jefe del aparato poítico del grupo municipal. A él le hemos preguntado si Page es de derechas o de izquierdas. Su respuesta, no deja lugar a dudas. Podrán leerla mañana. 


Pieza básica del engranaje municipal del nuevo secretario general del PSOE en sus dos legislaturas al frente del ayuntamiento toledano, Perezagua llegó para bailar con las más feas, el tráfico y cuerpos como la Policia Local y los bomberos, entonces lugares seguros de confrontación y polémica. En poco tiempo sacó el tráfico del debate, acabó con las riñas internas en el parque de bomberos y consiguió de la policía local el rendimiento para la ciudad que nunca había tenido. Podría decirse que Rafa Perezagua puede equivocarse, pero lo que se dice fallar, no falla.

En la entrevista reconoce que no se puede culpar de todo a la crisis y a José Luis Rodríguez Zapatero, al que sí reprocha haber dejado sola a Castilla-La Mancha en el asunto de la intervención de CCM. Tampoco se esconde ante la pregunta de qué errores llevaron a perder la Junta a José María Barreda y señala el aeropuerto de Ciudad Real como centro neurálgico del problema. Aunque añade que el PP estaba en el ajo de las decisiones y los intereses, «pero la factura la ha pagado solo el PSOE».

La paciencia, el sentido común, la lealtad al partido y una vocación decidida por resolver los problemas sin caer en el sectarismo, esa tentación que prolifera sin freno en buena parte de la clase política, son marca de la casa. 

Mañana, la entrevista íntegra en encastillalamancha.es.

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