La Audiencia Provincial de Toledo juzgará el martes a un hombre al que le piden cinco años y medio de cárcel y hacer frente a una multa de más de 15.000 euros por una agresión con arma blanca que han dejado a la víctima secuelas en dos dedos de la mano izquierda y múltiples cicatrices.
Según el escrito del fiscal, los hechos sucedieron en la madrugada del 31 de julio de 2010, cuando las dos personas se encontraban en el club Dulcinea, en el término municipal de Madridejos.
La víctima se dio cuenta de que el acusado se encontraba en el local y decidió acercarse a él para pedirle el pago de 100 euros que le debía por la venta de unos quesos.
Ante esta reclamación, el acusado dijo a la víctima que salieran a la calle y, tras discutir, fue a su coche y sacó un arma blanca, con la que hizo a la víctima un primer corte en la zona abdominal, después continuó con cortes sucesivos en los brazos, ya que trataba de protegerse de las agresiones, y un último corte en la zona costal, lo que provocó una importante pérdida de sangre y, a pesar de lo cual, el agresor se marchó del lugar y lo dejó abandonado.
La víctima tuvo que estar hospitalizado tres días a causa de estas lesiones y, además, arrastra secuelas como ansiedad y transtornos alimentarios, limitación de la movilidad de los dedos cuarto y quinto de la mano izquierda, sensaciones de hormigueo en ambos antebrazos y manos y múltiples cicatrices.
Por todo ello, el fiscal pide para el acusado cinco años y medio de prisión por ser sospechoso de un delito de lesiones con deformidad y el pago de multas que suman más de 15.000 euros, que se derivan de los tres días que permaneció hospitalizado (270 euros), los días que tuvo impedido para sus quehaceres habituales (8.820 euros) y las secuelas (7.000 euros).