«Me motiva a escribir estas líneas de reflexión sobre el agua, sobre el agua de nuestra tierra, una noticia aparecida hace unos pocos días en un medio de comunicación bajo el título: «La obra más polémica en LA región se presenta en el mundo como un proyecto exitoso y ejemplar: El acueducto Tajo-Segura es un ejemplo exitoso de transferencia de agua entre cuencas para los países de la ribera mediterránea………» y sigue desarrollándose la noticia en un seminario internacional organizado por el Instituto Mediterráneo del Agua y el Ministerio de Recursos Hídricos de Argelia.
Tampoco es para tanto. Porque desde esta concepción ¿que tendríamos que decir del proyectado trasvase del Ebro que a última hora fue «abolido» por el gobierno socialista de turno y que constituía la estrella del Plan Hidrológico Nacional aprobado por un gobierno del PP?
Soy ribereño y soy de los que opinan, sin pasión política-ideológica alguna, que la obra del acueducto Tajo-Segura, sus fines y su función no pude ni debe ser dinamitada, como pretendía el Sr. Barreda y el Partido Socialista, argumentando para ello que el agua de Castilla-La Mancha tenía que ser para Castilla-La Mancha. Es este un razonamiento tan localista, pueblerino e insolidario del que uno no puede presumir en absoluto. Que yo sepa el agua que hay en España es de dominio de todos los españoles, incluido la que baña nuestras costas (aunque aquí en Guadalajara, por mucho que se empeñen algunas, costas todavía no tenemos) y así entendido solo queda una razonable solución: Repartir el agua de forma justa y solidaria, evitando guerras entre sus propietarios (que somos todos) y dejando de utilizar esta como baluarte político regionalista.
Este objetivo es el que ha venido asumiendo siempre la política hídrica del Partido Popular, intentando cubrir las necesidades razonables de agua de todos los españoles, aunque naturalmente quienes más cerca estamos de ella seguramente siempre querríamos más y quienes más lejos están también más reclaman.
Los más cercanos, nosotros, los ribereños, con el suficiente agua para beber y para vivir asegurando nuestro desarrollo y no pretendiendo con ello el contemplar, con fines estéticos, cada día nuestros embalses al 100 por 100 de su capacidad.
Los más lejanos, los levantinos, con el suficiente agua también para beber y para vivir, pero eso sí, en un muy racional, ordenado, tecnificado, sostenible y no expansivo, uso del agua.
Este principio ¿Es posible con el mantenimiento razonable del Trasvase Tajo-Segura? Yo creo que sí, y sin magnificar (que no es necesario) esta obra realizada hace 35 años, un reparto justo del agua de nuestra cabecera del Tajo, es la solución.
Precisamente esa solución ha venido de la mano del PP, con el Plan Hidrológico de la cuenca del Tajo y con la Ley de Evaluación Ambiental.
Respecto a lo primero, los ciudadanos deben recordar que el gobierno de España debía de haber elaborado y aprobado antes de Diciembre del año 2009 todos los planes hidrológicos de nuestras cuencas, siguiendo las recomendaciones y directrices de la Directiva Marco Europea sobre el agua. Sin embargo, los dos gobiernos del Sr. Zapatero hicieron caso omiso de esta obligación y a raíz de eso nos llamaron muy seriamente la atención desde Europa mediante una sentencia de Diciembre del 2012.
El Plan Hidrológico de la cuenca del Tajo ya está elaborado y en breve será aprobado. Por lo que afecta a nuestros embalses de cabecera en el mismo se declara: «Implantación de un umbral mínimo de 400hm3 en Entrepeñas y Buendía». Esto significa nada menos que 160 Hm3 más que lo establecido hasta hoy.
Por si fuera poco lo establecido en este Plan, hace unos días se aprobó en las Cortes Generales la Ley de Evaluación Ambiental y en ella se determina con claridad que en los embalses de Entrepeñas y de Buendía será obligación legal el mantenimiento de una reserva estratégica de Agua no trasvasable de 400 Hm3, cifra que se irá alcanzando progresivamente en un plazo máximo de cinco años.
¿Significa todo ello un muy importante avance en la racional gestión y uso del agua para todos? SÍ, sin ninguna duda. Por eso no alcanzo a entender como desde el PSOE, especialmente el de Guadalajara, no dicen: «No fuimos capaces de hacerlo nosotros; seguramente no es todo lo que quisiéramos todos, pero es un avance y una gestión muy eficaz para nuestra tierra».
Porfirio Herrero Estébanez, senador del PP por Guadalajara.