«Nos vuelve a llenar de asombro a la profesión enfermera que siga siendo ésta la que en mayor medida continúe sufriendo los recortes sanitarios por cuarto año consecutivo en nuestra provincia.
Es indiscutible que nuestra profesión ha sido la más castigada con la excusa del cumplimiento de la austeridad y el déficit regional, que en la Ley de Garantías 1/2012 se proponían como temporales y excepcionales en las condiciones de los empleados públicos de esta comunidad. La dirección del Complejo Hospitalario de Toledo (CHT) tiene entre sus objetivos para el 2015 la disminución de un 10 por 100 en la contratación de enfermeras, auxiliares de enfermería y celadores eventuales con respecto a 2014.
El nuevo recorte que se propone ejecutar en el CHT se contradice con las continuadas noticias de mejora de la economía regional. Todos estos recortes en enfermería han ocasionado que el número de parados haya aumentado de forma asombrosa en los últimos años y que los enfermeros toledanos recién graduados, que son los mejor preparados de la historia, tengan que cuidar a pacientes en otras latitudes tanto nacionales como internacionales, viéndose obligados a emigrar o a ejercer trabajos no cualificados ni relacionados con su titulación. Indudablemente, los recortes presupuestarios y de personal de enfermería han ocasionado una disminución de la calidad asistencial y la seguridad clínica de los pacientes y usuarios durante esta legislatura.
Por todo ello, el Colegio de Enfermería que presido se ha posicionado de forma contundente frente a estas medidas de recorte continuado de recursos y así se lo ha hecho saber a la directora gerente del CHT, a la que se le insta a recuperar las dotaciones enfermeras que se han perdido durante estos años de continuos recortes, con el horizonte puesto en recobrar la calidad de los ciudadanos prestados al usuario y aumentar su seguridad clínica».
Roberto Martín, presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Toledo.