La vuelta de las vacaciones de verano se está notando en las carreteras, sobre todo en algunas autovías de entrada a Madrid, con retenciones de hasta 10 kilómetros y, concretamente en el caso de la A-5, a su paso por Otero (Toledo), con un atasco de 4 kilómetros.
Según los datos de la web de la Dirección General de Tráfico (DGT) relativos al estado de la circulación, pasadas las 13:30 horas la A-1 soportaba 10 kilómetros de circulación lenta a la altura de San Agustín del Guadalix en sentido a la capital.
Mientras, la A-6 tenía dificultades circulatorias en dos tramos, ambos con dos kilómetros de atasco: a la altura de Las Rozas y en Pozuelo de Alarcón, en sentido Madrid.
Otra vía afectada era la A-3 a su paso por Arganda, con otros dos kilómetros de circulación lenta hacia la capital.
Ya en el sur, la A-48 en Chiclana de la Frontera (Cádiz) sufría la afluencia de vehículos, así como la A-49 a su paso por Bolludos del Condado (Huelva) en sentido a la capital hispalense.
Mientras, en Levante la A-7 en Loriguilla (Valencia) y la A-31 en Villena (Alicante) eran las que presentaban más complicaciones.
En el norte, la A-8 en Sierrapando (Cantabria) tenía a esa hora cuatro kilómetros de retenciones hacia Bizkaia.
Según la DGT, este fin de semana se va a registrar un récord de desplazamientos de vehículos del año con 4.750.000 movimientos, al coincidir el fin de las vacaciones para muchos conductores y el comienzo del descanso estival para algunos menos.