Los sindicatos STAS, UGT, CCOO y CSIF se han levantado de la reunión de la Mesa Sectorial de la Función Pública ante la «imposición» del Gobierno de Cospedal de mantener el despido de 88 orientadores de empleo.
Según ha informado el STAS, la dirección general de la Función Pública había convocado una Mesa Sectorial para la «negociación» de una modificación de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) consistente en la supresión de 88 orientadores de empleo, que «vienen a engrosar la macabra cifra de despidos provocados por Cospedal y su gobierno».
«Este caso -afirma el STAS- es uno de los más claros despropósitos de la Dirección General de la Función Pública en cuanto a la prestación de los servicios públicos».
Los puestos que se quieren suprimir vienen desarrollando sus funciones desde el año 2008, cuando, por la situación extraordinaria de número de parados, se pusieron en marcha una serie de medidas que incidiesen en las políticas activas de empleo.
Desde ese momento, y tras sucesivas prórrogas, se constata por la propia Administración, los usuarios y empresas e incluso por un informe realizado por una empresa independiente, que estos trabajadores desarrollan su trabajo con un nivel de cumplimiento de los objetivos que supera el 100 por 100 en muchos casos y una satisfacción muy alta entre empresas y trabajadores, afirma el STAS.
La situación de desempleo actual hace «impensable» no contar con este servicio que si era urgente e imprescindible en el año 2008 y sucesivos, ahora lo es más si cabe y de hecho otras comunidades van a seguir con el modelo, aunque se cierre la financiación del estado.
La temporalidad de los puestos, que alega la Administración, quedó superada por la creación en la RPT de dichos puestos sin más consideración sobre su temporalidad y, por tanto, «eran indefinidos».
Los sindicatos se han levantado de la Mesa Sectorial de la Función Pública porque mantienen seguir con los despidos «sin cambiar una coma», por lo que el «paripé» de la negociación, ya denunciado judicialmente en anteriores ocasiones, vuelve a presidir la mesa sectorial.
Si esto no fuese suficiente para provocar nuestra marcha de la reunión, la situación «mas escandalosa», dicen, se ha producido cuando a las reiteradas peticiones de información del modelo que se pretende implantar se nos contestó diciendo que esa cuestión no era asunto de esta mesa y que sería con un sistema de colaboración con lo privado, sin mas explicaciones.
A pesar de nuestra insistencia no se ha querido facilitar más información, por lo que se temen que la presidenta Cospedal «quiera hacer también negocio, para algún ‘amiguete’, con los parados y paradas de la región».