El Sistema de Gestión de Aceites industriales Usados en España (Sigaus) ha gestionado 6.655 toneladas de este residuo en Castilla-La Mancha durante el año 2023, procedentes de 4.500 establecimientos de diversa tipología, el 51 por ciento de ellos talleres mecánicos.
Según ha señalado Sigaus en nota de prensa, la gestión del aceite industrial usado en Castilla-La Mancha es «un modelo ejemplar» de cómo un residuo peligroso puede ser recogido en cualquier punto geográfico donde se genere y 100 % aprovechado como materia prima o energía.
En concreto, 4.555 establecimientos e instalaciones de la región han generado aceites usados en 2023 y en ellos Sigaus ha recuperado 7.263 toneladas brutas de residuo a través de 10.129 operaciones de recogida en 507 municipios castellanomanchegos.
El 51 % de estos puntos generadores han sido talleres de reparación de vehículos, entre los que se incluyen establecimientos multimarca, concesionarios y talleres independientes, en los cuales se ha recuperado el 51 % (3.667 toneladas) del aceite usado que se generó en Castilla-La Mancha durante el pasado año.
Asimismo, el 49 % restante se ha recogido en la industria y otros muchos sectores como el transporte, la energía, la construcción, la agricultura, la hostelería y los servicios públicos (desde puntos limpios municipales o comarcales hasta centros educativos, hospitales y fuerzas de seguridad y emergencias).
Áreas de especial dificultad
Además, el 88 % de los municipios castellanomanchegos en los que han efectuado recogidas han sido rurales, de manera que en estas áreas se han recuperado 3.230 toneladas de aceites industriales usados, el 44 % de la cantidad total recogida.
En las zonas de montaña, donde la orografía aporta una complejidad adicional para el servicio de recogida, se han recuperado 466 toneladas en 103 municipios, y en 235 municipios de menos de 1.000 habitantes se han recogido 407 toneladas de aceite usado.
También en zonas próximas a espacios naturales protegidos se han recogido 623 toneladas de aceites usados, que se han generado en 447 establecimientos ubicados en las cercanías de 20 espacios protegidos, y en el entorno de recursos hídricos se han recuperado 77 toneladas de aceites usados generados en 55 puntos.
La cantidad recogida en Castilla-La Mancha durante el pasado año ha sido valorizada en su totalidad, una vez excluidos los impropios (agua y otros sedimentos), y del residuo neto finalmente gestionado (6.655 toneladas), el 83 % se ha destinado a regeneración y ha sido posible reincorporar al mercado 3.466 toneladas de nuevos lubricantes, suficientes para llenar el cárter de 860.000 coches.
Y el 17 % restante del residuo recuperado se ha descontaminado para obtener un combustible -llamado fuel BIA- que sustituye al fuel óleo tradicional y que puede ser utilizado en centrales térmicas, hornos y otras instalaciones industriales, y 1,7 millones de barriles se han ahorrado por la gestión realizada en Castilla-La Mancha