De ella se ha dicho que es la exposición más importante jamás realizada en Talavera, ciudad que -por otro lado- está obligada a dar cobijo a esta muestra que tan bien define su historia y tradiciones. El 21 de septiembre quedaba inaugurada «aTempora Talavera. Seis mil años de cerámica en Castilla-La Mancha», que ha llegado para convertirse en uno de los principales acontecimientos culturales de 2018 y de principios de 2019 en la región.

Hasta el 27 de enero de 2019 el arte del barro será el protagonista de esta cita promovida por la Junta de Comunidades -a través de la Fundación Impulsa Castilla-La Mancha- y en la que colaboran diversas instituciones y entidades como la Diputación Provincial, el Ayuntamiento de Talavera y la Fundación San Prudencio. En ella 1.200 piezas, 200 restauradas para la ocasión, dan una visión muy amplia de la cerámica producida en Castilla-La Mancha o presente en la región, subrayando la relevancia de esta artesanía como fuente de expresión artística, como elemento de uso doméstico e industria generadora de riqueza, y también como elemento clave en la promoción turística y cultural del territorio.

«aTempora Talavera» estará distribuida en cuatro sedes: la antigua iglesia de Santa Catalina (San Prudencio), un edificio tan emblemático como soberbio que ha sido notario del devenir de la historia desde que en 1372 el arzobispo Tenorio fundase el convento; el Museo Ruiz de Luna, localizado en un antiguo convento agustino del siglo XVII y que fue creado para albergar la colección personal del ceramista Juan Ruiz de Luna; el antiguo Hospital de la Misericordia, recuperado para ser el Centro Cultural Rafael Morales, un edificio fundado en 1475 por un visitador del arzobispo Carrillo; y el claustro de la colegiata de Santa María La Mayor, la Colegial, localizado en la plaza del Pan -como la anterior sede-, un templo del siglo XIV de estilo gótico-mudéjar declarado Bien de Interés Cultural.

La exposición se desarrolla cronológicamente a través de estas cuatro sedes. Así, en primer lugar, en la iglesia de Santa Catalina se aborda la Prehistoria y Protohistoria; la cerámica ibérica, romana y visigoda; la Edad Media islámica y cristiana; el esplendor que representan las cerámicas de Talavera y El Puente del Arzobispo; y el comienzo del taller de Ruiz de Luna.

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En segundo lugar, el Museo Ruiz de Luna reúne el «Renacer de la cerámica que supone el taller de Ruiz de Luna (1907-1961)»; mientras que el Centro Cultural Rafael Morales continúa con los talleres que desarrollaron su trabajo en Talavera y El Puente del Arzobispo desde finales del siglo XIX hasta finales del siglo XX, así como los creadores actuales de cerámica.

El recorrido concluye en el claustro de la Colegial con reproducciones de cerámica de Talavera en fotografías de gran formato que, por su tamaño y características, no se han podido trasladar.

Horarios de apertura

El horario de apertura de «aTempora Talavera. Seis mil años de cerámica en Castilla-La Mancha» en la iglesia de Santa Catalina (plaza de San Jerónimo, s/n) es de martes a sábado, de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 18:00 horas; y domingos y festivos, de 10:00 a 14:00 horas.

En el Museo Ruiz de Luna (en la calle San Agustín el Viejo, 13), se podrá ver de martes a sábado de 9:45 a 14:00 y de 15:45 a 18:30 horas y domingos y festivos de 10:00 a 14:00 horas.

En el Centro Cultural Rafael Morales (Plaza del Pan, 5), estará abierta de lunes a sábado de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00 horas.

Por último, en el claustro de la Colegial de Santa María (plaza del Pan, s/n) el horario es de martes a sábado, de 10:00 a 14:00 horas y 16:00 y 18:00 horas; y domingos y festivos de 10:00 a 14:00 horas).

Cerrará todos los lunes y los días 24, 25 y 31 de diciembre, así como el 1 y 6 de enero. También los días festivos en el caso del Centro Cultural Rafael Morales.

«aTempora Talavera» dará el relevo a una segunda exposición sobre cerámica -en este caso sobre cerámica popular- que tendrá lugar en la ciudad -en la iglesia de Santa Catalina- hasta mayo de 2019, dos actuaciones con las que también se pretende que, tras admitir su candidatura, la cerámica de Talavera y El Puente del Arzobispo sean incluidas por la Unesco en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.