El bar Jhony-España Profunda lo volvió a hacer. Volvió a desatar la locura en el barrio de Los Tres Olivos, en Talavera, en la mañana de Nochebuena. 12.000 botellines despachados en poco más de seis horas y tuvo que cerrar porque se quedó sin existencias.
Superó las previsiones
Jonathan Rivera, el dueño del bar, explica a encastillalamancha.es que la afluencia de gente rebasó todas sus previsiones. Pensaba que como mucho vendería 10.000 botellines, pero fue previsor y enfrió otros 2.000 más. La fama que está cogiendo pasar la mañana del 24 en este bar hizo que todas las estimaciones se quedasen cortas y poco después de las 16 horas tuvo que dejar de vender botellines porque ya no quedaban fríos.
Creía Rivera que cayendo en martes los talaveranos se iban a animar menos que el año anterior, cuando despachó 10.500, pero la afluencia de gente fue bestial, tanto que la Policía Local tuvo que cortar una de las avenidas más importantes de Talavera, la Francisco Aguirre, para que no se produjese ningún incidente por la gran masa de talaveranos congregados en el Jhony-España Profunda.
El Jhony-España Profunda, el bar que arrasa en Nochebuena en Talavera. Foto: Laura Núñez.
Y es que la fiebre de los botellines a un euro volvió a arrasar. Allí, tras la barra, solo despachando cerveza, estaba el propio Jhony junto con su esposa, su hermana y su hermano, y también tuvo más ayuda de personal para preparar los bocadillos y las migas que daba como aperitivo para los miles de botellines que iban saliendo.
La jornada comenzó sobre las 12 horas, cuando fueron desfilando las primeras cajas de botellines. Durante seis horas fueron acudiendo cientos de talaveranos al bar, hasta que a las 16 horas se acabó la cerveza fría y una hora más tarde, a las 17, tuvo que dejar de despachar del resto de bebidas porque las existencias también se estaban agotando.
Otra curiosa jornada de Nochebuena en Talavera en la que ya solo queda preguntarse si el año que viene se hará todavía más grande el evento.