El Gobierno local de Toledo que preside Milagros Tolón ha manifestado su rechazo a la aprobación de una nueva derivación (trasvase) de agua al Segura por las consecuencias que supone para la calidad del río Tajo a su paso por Toledo y ha reclamado al Gobierno central que ponga en marcha medidas preventivas que no conlleven un menoscabo del principal recurso natural de la ciudad.
Solidaridad entre territorios y no al trasvase
Según informa el Consistorio en un comunicado de prensa, una vez confirmada la decisión del Ejecutivo estatal de aprobar un nuevo trasvase de 38 hectómetros cúbicos del Tajo al Segura, el equipo del Gobierno ha expresado su rechazo ante una medida que «condiciona el desarrollo económico y social de Toledo y del resto de municipios ribereños y que impide la regeneración natural del río».
El Ayuntamiento espera que los actuales responsables se alejen de estas políticas trasvasistas y apuesten de forma decidida por la solidaridad entre territorios sin comprometer la recuperación del Tajo y «desarrollando herramientas alternativas que satisfagan las necesidades de abastecimiento de todos los ciudadanos».