El concejal de Gestión de los Servicios del Ayuntamiento de Toledo, Gabriel González, ha informado del Plan Básico de Control de Plagas que de manera «continuada y mantenida en el tiempo» lleva a cabo el Ayuntamiento a lo largo del año con campañas de choque programadas y un permanente sistema de respuesta a los avisos que se reciben sobre incidencias en entornos públicos.
González ha destacado en rueda de prensa la eficaz gestión que realizan en este ámbito los técnicos municipales de la Adjuntía de Medio Ambiente en colaboración con la empresa Denfor, concesionaria del servicio, un trabajo «poco agradable» que, sin embargo, se realiza con diligencia y todas las garantías de seguridad y salubridad para los vecinos y los trabajadores.
El concejal ha explicado que el Servicio de Desratización, Desinfección y Desinsectación consiste, básicamente, en la ejecución de los programas de lucha antivectorial integrada y permanente contra lo que vulgarmente se conoce como ratas, ratones, cucarachas, mosquitos y gérmenes patógenos, simplificando su nombre científico.
En esencia, los programas de lucha vectorial integrada consisten en mantener en el tiempo operaciones de eliminación, reducción y control mediante la aplicación de los métodos químicos y biológicos que sean necesarios, así como por el establecimiento de barreras físicas, y acciones preventivas, si son posibles, todo ello aplicando metodología científica.
«Para conseguir estos objetivos sin perjudicar el medio ambiente general con la proliferación de tratamientos duros de choque consistentes en la aplicación masiva de pesticidas, se elaboró en su día un Plan Básico de Control de Plagas, a los efectos de vincular las actuaciones en él reflejadas al contrato suscrito con la empresa adjudicataria de la prestación del servicio», informan en nota de prensa.
En el apartado relativo a frecuencia, se contemplan campañas de choque para tratar cada una de las plagas, al menos dos anuales en lo que se refiere a ratas y cucarachas, así como seguimientos mensuales de la evolución de la eficacia de las medidas.
En lo relativo a mosquitos, se realizan tratamientos larvicidas preventivos en zonas húmedas y márgenes del río, cuando el ciclo biológico y estacional lo recomienda, y tratamientos adulticidas de control de poblaciones, asociadas normalmente a masas forestales y zonas verdes, en función de las circunstancias.
En resumen, el Plan Básico de Control de Plagas «es una lucha continuada y mantenida en el tiempo con dos pilares básicos: Campañas de choque y sistema de avisos con los que se pretende conseguir el mayor nivel de eficacia con el menor coste ambiental y riesgo sanitario de tratamientos».
El concejal de Gestión de los Servicios ha señalado que el año pasado este servicio atendió un total de 99 avisos relacionados con aparición de ratas y 160 sobre cucarachas. En lo que va de 2014 las comunicaciones en estos ámbitos son 52 y 98, respectivamente.