La Federación Empresarial Toledana (Fedeto) calcula que la subida de la factura del agua tras la sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de la capital que obligó al Ayuntamiento a ejecutar este incremento, repercutirá en un ocho por ciento en los empresarios de la ciudad.
Así lo ha indicado a preguntas de los medios en una rueda de prensa el secretario general de Fedeto, Manuel Madruga, en la firma del convenio de colaboración entre la Asociación Española Contra el Cáncer de Toledo y la patronal toledana, que ha firmado el presidente de Fedeto, Javier de Antonio, y el presidente de la Asociación, Fernando Jou.
Allí, ha apuntado que el incremento supondrá «una burrada» para sectores como la hostelería y que «no se entiende». En la factura de los hogares, la subida se estimaba de media en unos 52 euros más al año, aunque en las empresas la subida podría ser mucho mayor, puesto que el consumo puede ser mucho más elevado.
En este sentido, ha explicado que cuando se hizo el contrato con la concesionaria del agua se estimó que la ciudad iba a tener en muy poco tiempo 120.000 habitantes. «Pero vamos para atrás, como los caracoles, y quieren que pagamos como si hubiera 120.000 habitantes cuando hay bastantes menos».
Es por ello por lo que ha abogado por regular asuntos como este «de otra manera». «Hay que hacérnoslo mirar porque, desde luego, esto nos va a costar una pasta», ha concluido.
Los datos «no son ciertos»
En otro orden de cosas, Madruga ha sido preguntado por los datos del comercio minorista publicado este miércoles por el INE, y que señalan que en la región ha subido un 5,5 por ciento hasta diciembre del pasado año, para afirmar que «no son ciertos», ya que este sector ha perdido en torno a un tercio de las ventas que tenía en campaña de Navidad y que tenía en campaña de rebajas.
«Si suponía en años anteriores en torno a un 30 por ciento se ha quedado en el 20 por ciento lo que contrasta paradójicamente con lo que ha sucedido en la hostelería, y es que ha subido un 20 por ciento la facturación», ha dicho, para afirmar que no sabe de dónde se sacan esos datos estadísticos porque Fedeto, a nivel provincial está «comprobando todo lo contrario».
Algo que ha hecho extensible al desempleo para afirmar que hay 3,5 millones de desocupados apuntados en el SEPE, pero solo se dice que hay 2,7 millones, lo que ha calificado como «cosas mágicas» al igual, que los datos de afiliados a la seguridad social con los contratos «miserables» de menos de 30 días.
«Sin embargo, esto va de jauja y los datos son muy buenos, aunque la cruda realidad lo que está implicando es que la economía española está sufriendo un deterioro brutalmente grande que no estamos queriendo ver ni reconocer», ha afirmado, para criticar que estos datos que considera «falsos» se tienen en cuenta para subir el Salario Mínimo Interprofesional o para reducir la jornada laboral.
En este sentido, ha vaticinado que quedan «cantidad de políticas» por parte del Gobierno y que, según ha afirmado, no serán más que «un intento de congratularse por lo que han hecho con la amnistía». «Nos volveremos muy modernos, pero esto no es Suecia porque allí el gobierno y las administraciones apoyan esas medidas de conciliación y ponen dinero encima de la mesa, pero aquí no y se lo come el empresario única y exclusivamente».
«Abuso brutal del ausentismo fraudulento»
A todo ello, ha sumado «la paradoja» de que «no habiendo unos datos de paro buenos» no se encuentra gente para trabajar. «Existe un abuso brutal de ausentismo fraudulento, pero esto no se puede decir por qué somos fascistas y los implicados se nos echan encima».
«Aquí la gente rechaza tres puestos del trabajo y no pasa nada y creo que nos estamos equivocando mucho y nos vamos a encontrar con una sorpresa a la vuelta de la esquina que va a ser bastante dolorosa porque el efecto del SMI o de querer reducir la jornada no es inmediato sino que se ve a lo largo», ha argumentado.
Preguntado por los sectores en la provincia en los que faltan trabajadores, Madruga ha dicho que en «prácticamente» todos por lo que ha avanzado que Fedeto ha propuesto una prueba piloto a la Junta para ver si se puede formar en menos de ocho meses a personas para que puedan incorporarse al mundo del motor, que es uno de los sectores más perjudicados en este sentido.