«Doña Lola’ y ‘La Caprichosa’ son dos despachos de lotería emblemáticos de Toledo que en los últimos años han repartido un montón de buena suerte entre muchos compradores agraciados. A rebufo de estos éxitos, este año están vendiendo tanto y tan bien que, eufóricos, sus dueños y empleados confían en seguir acogiendo a la diosa fortuna.
Situadas en pleno corazón del casco histórico de Toledo, sus inmediaciones consisten estos días en un trasiego de personas que entran y salen de los despachos con la íntima esperanza de que esta vez, sí, les tocará a ellas. ¿Por qué no? ¿Por qué la buena suerte no va a desplegar su manto de felicidad otra vez sobre ‘La Caprichosa’ y ‘Doña Lola’? Pero hay que llamarla. Hay que jugar.
Cristina Carrascosa, de la familia propietaria del despacho de loterías ‘Doña Lola’, situado en la calle Toledo Ohio, número 11, asegura que la venta de décimos de la Lotería de Navidad va «muy bien». De hecho, desde el de julio, en pleno verano, están vendiendo. «Como Toledo está lleno de gente, las ventas van bien», asegura.
50 años de ‘Doña Lola’
Como no puede ser de otra manera, la buena racha ganadora de los últimos años tiene su recompensa: «Llevamos unos años dando buenos premios, aquí nos conoce todo el mundo», asegura Cristina, quien cuenta que el despacho es de tradición familiar. Van ya por las tres generaciones. «El despacho era de mi abuela. Precisamente este año hacemos el 50º aniversario. Después pasó a mi madre y ahora estamos más familiares», informa.
Manías: fechas de nacimientos de niños, bodas… y fallecimientos
Todo en Navidad es tradición, como las manías de los compradores al hacerse con un décimo. «Muchas manías», asevera: «Aquí hay discusiones de todo tipo…», sonríe. El número más deseado sigue siendo el ’13’. Y en cuanto a las manías, por ejemplo las fechas de nacimiento: «Sobre todo de niños, por eso en este año hay muchas fechas que nos piden; también de bodas, incluso de fallecimientos», dice.
Cristina, como todos, también es compradora, sobre todo de Lotería de Navidad. Nunca le ha tocado ningún premio. Adquiere los décimos en los sitios más queridos, adonde va siempre.
En estas fechas no existe un perfil de comprador. Juega todo el mundo. «Juega a la Lotería de Navidad el 90% de los españoles por la tradición que tenemos. El resto del año se queda para gente que juega mucho, heredado de sus padres», asegura.
‘Doña Lola’ lleva a cabo una promoción este año: un sorteo diario en Cadena Dial de un décimo desde del 19 de noviembre hasta el 20 de diciembre. Este despacho de loterías, por estas fechas, está (felizmente) sometido a una actividad frenética: abren a las 9 de la mañana y cierran… Sin ir más lejos, este último sábado estuvieron vendiendo billetes de lotería hasta las 23 horas. Y es que la buena suerte hay que buscarla. Y de qué manera.
¿Confía Cristina Carrascosa en que ‘Doña Lola’ vuelva a repartir felicidad? «Eso es lo que deseamos todos los años, para eso trabajamos. Ya veremos, a ver qué tal…»
Cristina Carrascosa. Foto: Rebeca Arango.
«Al final no me va a tocar ninguno…»
La calle es un trasiego tremendo. Justo a la salida del despacho, ENCLM perpetra un atraco periodístico en toda regla, ya que aborda, sin posibilidad de inútil resistencia, al compañero de profesión Jesús Gallardo, quien tiene un número abonado en ‘Doña Lola’. «En Navidad jugamos como todo el mundo, compartiendo números con familia, amigos… esperando que algún día seamos beneficiarios de esa suerte que por el momento no ha llegado», comenta de primeras.
Jesús no es supersticioso a la hora de comprar: «Digo en la ventanilla que me den el que quieran y ya está. Al final no me va a tocar ninguno, ni el que pida yo ni el que me den en ventanilla, así que me da igual».
No solo juega en Navidad, ya que apuesta todas las semanas a dicho número abonado. ¿Y si te tocara el Gordo? «Primero que me toque. Lo pensaría. No pierdo el tiempo en pensarlo porque no me toca y tengo casi la convicción de que me va a seguir sin tocar… Pero imagino que como todos: sería para tapar agujerillos o darte algún capricho, para algún viaje y ayudar a la familia».
Este periodista tan poco optimista, con todo, confía en que ‘Doña Lola’ vuelva a repartir jolgorio, como en años pasados: «A ver si llega la suerte igual que el año pasado a Toledo y se queda aquí, entre estas calles». concluye.
‘La Caprichosa’: «Desde agosto es la locura»
Irene Rodríguez es una de las tres personas que atienden al nutridísimo personal que acude sin descanso al despacho de loterías ‘La Caprichosa’, situado en la calle Comercio, 27, que el año pasado situó su propio listón en lo más alto posible, repartiendo nada menos que el Gordo de la Lotería de Navidad y el primer premio de la Lotería del Niño, a pesar de lo cual esta joven confía en que ‘La Caprichosa’ vuelva a hacer la doble gesta, para la buena suerte de tantos compradores.
Este reparto tremendo de grandes premios en Toledo capital se está notando lógicamente en un aumento de las ventas: «Hay todavía más gente que el año pasado, colas y colas, y la verdad, muy bien, está habiendo muchas ventas», asegura, mientras los apostantes hacen una pequeña cola (son las primeras horas de la mañana) y en todo caso convierten esta zona de la calle Comercio en un bullicio: muchas personas entran y salen sin descanso del establecimiento.
Irene Rodríguez. Foto: Rebeca Arango.
Y no hay que creer que esta locura por probar la suerte en ‘La Caprichosa’ ha empezado hace poco tiempo: «Desde agosto es la locura. Ahora más, claro, pero desde ese mes estamos con la Navidad a tope», afirma esta empleada de ‘La Caprichosa», que añade que venden en toda España vía pedidos web o por teléfono.
Están todo el día con la ‘faena’: «Empezamos a las 9 y ya cortamos… cuando la gente nos deja. Este último sábado eran las 12 de la noche y esto seguía lleno», afirma Irene Rodríguez, quien desvela que la gente apuesta mucho por los números que acaban en ’13’ (y eso que históricamente es sinónimo de mala suerte…), también el 69, el 15… «Aunque al final compran lo que hay».
Como en el resto de despachos, hay compradores que piden números que coinciden con efemérides, fechas de nacimiento…, «tanto por teléfono como por persona», subraya.
Un décimo con trapío…
ENCLM aborda a Tomás, que acababa de comprar tres décimos de lotería de un número encargado por la peña taurina ‘El Trapío’, una tradición de todos los años. Se le pregunta por el mencionado listón máximo que colocó ‘La Caprichosa’ el año pasado, que va a intentar emular este año: «Es un problema para los que jugamos aquí porque sería mucha casualidad que uno entrase, comprase un décimo y fuera justo ese el que cayese; sería una mala sombra que, tras comprarlo aquí, no tocase, y es que hay 200, 300 números», contesta.
Este vecino de Toledo no tiene manías a la hora de comprar; es más, en el caso del número de ‘El Trapío’, es elegido por el presidente de la peña, que es quien tienta a la suerte: «No tiene ningún sentido porque todas estas elucubraciones sobre si va a salir este o el otro número… son ganas de vender periódicos», piensa.
Antonio juega casi solo en Navidad: «Además de la tradición, uno tiene compromisos con familia, amigos, lo que te obliga a comprar. Yo no soy de lotería», desvela, y admite que a la peña nunca le ha tocado la lotería. También dice que él conoce a personas y empresas que llevan jugando toda la vida, y no solo en Navidad: «Y nunca les ha tocado un premio importante, como a mi yerno, que juega todas las semanas a un número que termina en 7, y solo alguna vez le ha tocado el reintegro, y que no pida más… ja, ja».
Se despide recordando que hace pocos años le tocó la ‘pedrea’, unos 100 euros, entre varios amigos -cada uno compró un décimo. «Me tocó a mí, y a comer que nos fuimos», concluye. «¡Suerte y al toro!»