El VIII Centenario de la Catedral de Burgos, que se celebrará en 2021, ha propiciado este sábado el hermanamiento de la ciudad de Castilla y León con la de Toledo, permitiendo que en el futuro ambas compartan exposiciones, actuaciones musicales y otras experiencias.
Así lo han puesto de manifiesto tras la firma del acuerdo de hermanamiento cultural el alcalde de Burgos, Javier Lacalle, y la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, que inicia desde ahora «el camino de todo el trabajo de intercambios» que harán ambas ciudades durante los próximos años, siempre con el centenario de la Catedral burgalesa de fondo.
Lacalle, que ha resaltado el apoyo y consenso logrado por todas las formaciones políticas en los consistorios tanto de Burgos como de la capital regional en torno a este proyecto -confiando en que «pase lo que pase» en las próximas elecciones en cada ciudad continuarán estas relaciones-, ha resaltado las similitudes existentes entre la ciudad que preside y Toledo y su «importante relación en los siglos» como uno de los motivos que «pueden aportar conocimiento, experiencia y buenas prácticas» a esta iniciativa.
[ze_summary text=»Burgos se ha fijado en las últimas celebraciones de Toledo»]Burgos se ha fijado en las últimas celebraciones de Toledo[/ze_summary]De hecho, Burgos se ha fijado para esta conmemoración tanto en los actos que organizó Toledo con motivo del IV Centenario de la muerte del Greco como los que albergó siendo Capital Gastronómica y con motivo del 30 aniversario de su nombramiento como Ciudad Patrimonio de la Humanidad. Así, como ha confesado el primer edil, hay ya «alguna actividad» sobre la que se está trabajando como una exposición que destaque el origen de Burgos con «todo lo que significa» y alguna actuación musical de grupos de Toledo, «alguno especialmente conocido».
[ze_summary text=»Quieren una programación bastante estable para 2019″]Quieren una programación bastante estable para 2019[/ze_summary]«Queremos una programación bastante estable durante 2019», ha resaltado Javier Lacalle, que ha subrayado que el valor de este acuerdo de hermanamiento «es el que le queramos dar en los próximos meses o años», y en él se incluirán «actuaciones concretas» durante la celebración de reuniones periódicas de una comisión de seguimiento –compuesta no sólo por políticos sino también con profesionales culturales– que se constituirá en Burgos «o bien antes de Navidad o en las primeras semanas del mes de enero».
Entre las acciones que ha comentado Lacalle, y que se trabajarán gracias a «un contacto permanente de profesionales de ambas ciudades», que empezarán «ya» a trabajar en las distintas iniciativas, habrá un «especial protagonismo» de la Oficina de Turismo de Toledo en Burgos, con el objetivo de ofrecer «cariño e información» de la capital castellano-manchega en la ciudad burgalesa.
Dicho esto, ha valorado los tres «sellos Unesco» que tiene Burgos, en referencia a la Catedral, el yacimiento de Atapuerca y el Camino de Santiago francés, confiado en que «algún día» su ciudad entre a formar parte de la Red de Ciudades Patrimonio de la Unesco, de la que sí forma Toledo. En este punto, Tolón se ha comprometido a dar su apoyo a la inclusión de Burgos en ese grupo porque es algo «muy merecido».
«Ciudades parecidas»
La alcaldesa de Toledo ha rememorado la experiencia que la ciudad tiene en materia de hermanamientos, al haber realizado el primero del mundo en 1931 con Toledo Ohio, algo que «abrió un camino» que han seguido posteriormente muchas ciudades. No obstante, ha resaltado que el que se ha firmado este sábado lo es entre «dos ciudades muy parecidas en historia, cultura y arte», deseando también que «muchos territorios de España tomaran nota» de un acto que se ha llevado a cabo «por unanimidad».
Milagros Tolón, que ha agradecido el papel del vicepresidente de la Fundación VIII Centenario de la Catedral de Burgos, Michel Méndez Pozo, ha repasado algunos de los nexos de unión entre Burgos y Toledo a lo largo de los siglos, valorando este tipo de actuaciones porque «contribuyen a abrir un horizonte diferente y nos hace aprender de las ciudades hermanas».
Al respecto, ha subrayado que este protocolo «quiere recrear el pasado pero tiene intenciones de mirar al presente», tomando como referencia algunos de los eventos que han sido «un éxito» en el pasado para la ciudad. «Toledo va a estar apoyando» esta iniciativa, ha finalizando, animando a «que la sociedad burgalesa se sienta cómplice del proyecto» al que ha deseado un «gran éxito».