El Grupo Municipal IU-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo ha criticado que la ciudad va camino de su primera quincena con el título de Ciudad Europea del Deporte «sin un programa de actividades, sin un plan de inversiones deportivas y sin esas nuevas instalaciones que iban a engrandecer la práctica de la actividad deportiva en la ciudad».
Así lo ha dicho el concejal de Izquierda Unida-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, quien urge al presidente del Patronato Municipal Deportivo y concejal de Deportes del Consistorio a que «convoque un Consejo Rector en el Patronato para debatir, conocer y valorar el programa de actividades deportivas que jalonarán todo el 2025 como Ciudad del Deporte», según ha informado en nota de prensa.
Porque, asevera Fernández ante la carencia de un calendario de propuestas deportivas, Toledo será Ciudad del Deporte «cuanto más participadas sean sus actividades, y excluir a los grupos municipales es un mal inicio de un año que debería ser un revulsivo para la ciudad».
El portavoz de Izquierda Unida exige conocer y hacer público el programa de actividades que «verdaderamente doten de contenido» a este título con apellido ‘Europeo’ durante 2025 y lamenta que aún no se conozca el reiteradamente anunciado plan de inversiones que, en palabras del concejal del ramo, Rubén Lozano, iba a «ofrecer a toda la ciudadanía instalaciones de calidad y en cantidad suficiente para que pueda cubrir la demanda que hay de deporte en la ciudad».
Al respecto, lamenta Fernández que hayamos empezado el año sin el pabellón de la Escuela de Gimnasia, al que se ha dado un nuevo plazo de apertura «que permite pensar que no estará listo hasta primavera», pero sí «con un renovado –con fondos públicos– césped en el anexo al Salto del Caballo».
Y critica el concejal que este campo, que lo usa en exclusividad la Sociedad Anónima Deportiva CD Toledo, disponga ahora de un césped de mucha calidad «mientras que el que han retirado de este anexo y que no reunía condiciones mínimas, lo instalan en la escuela de Educación Física, según dice el propio concejal de Deportes, para que lo usen las escuelas deportivas públicas del PDM o las ligas de Fútbol 7 que pagan más de 1.000 euros por jugar en un césped que no valía para practicar ese deporte».
Un Carlos III exclusivo
Por otra parte, el portavoz de IU también lamenta que en 2025 se haya previsto una inversión de 400.000 euros para recuperar el Campo Carlos III, una instalación deportiva que también «será financiada con fondos municipales y que, mucho nos tememos, va a ser una instalación exclusiva y excluyente, tal y como se puede concluir del expediente que tramita el Ayuntamiento», pese a las afirmaciones del concejal de Deportes en el último pleno del año en el que afirmaba que «será usada y utilizada por el Patronato y sus escuelas deportivas».
Y se remite Txema Fernández al contenido del convenio firmado con la Universidad de Castilla-La Mancha en el que se dice que será un «nuevo campo de césped artificial que cumpla con altos estándares de rendimiento técnico». No parece pues que, con esta filosofía, vaya a ser una infraestructura que pueda usar cualquiera, considera Fernández, y, probablemente, matiza, la «acaben usando profesionales de este deporte».
«Mucho nos tememos que ese alto estándar de calidad no estará disponible ni para las escuelas municipales, ni para cualquiera que lo quiera usar alquilándolo», augura.
Por este motivo, y ya que se trata de fondos municipales, desde el Grupo Municipal de Izquierda Unida-Podemos reclaman al Gobierno del Ayuntamiento «que ejecute políticas útiles para los vecinos y vecinas» como invertir esos 400.000 euros en buscar soluciones al problema de la vivienda que en 2024 se significó como «una de las principales preocupaciones de la población, especialmente la joven».
En este sentido, señala Fernández que «no tenemos una crisis futbolística en Toledo, pero sí un problema de acceso a un derecho que cada vez más se ha convertido en un lujo al alcance solo de unos pocos y de fondos inmobiliarios».
Por ello, propone, como recogían sus alegaciones a los presupuestos, que con esos 400.000 euros se adquieran algunas de las 42 viviendas que tiene la Sareb en la ciudad o algunos de los 105 solares «para poder construir vivienda para colectivos que la demandan y que el Ayuntamiento sea actor principal en la resolución de esta demanda social».