Kiko no lo dudó un momento. En cuanto conoció la magnitud de la erupción del volcán Cumbre Vieja, en la isla de La Palma, se planteó buscar una forma para ayudar a los plataneros de la zona.
Y, ¿quién es Kiko? Pues su nombre es Francisco López-Rey Guerra y es el responsable del establecimiento Frutas y Verduras Kiko, situado en el barrio toledano de Santa Bárbara, en la capital regional.
Una ayuda a La Palma por cada kilo de plátanos comprado
Este trabajador nato, natural del municipio toledano de Polán, sabía que tenía que echar un cable a la gente de La Palma y decidió que de cada kilo de plátano de Canarias, vendido en su tienda durante el mes de octubre, 0,50 céntimos irían destinados al municipio de Los Llanos, en La Palma.
Y se puso manos a la obra, logrando vender 450 kilos aproximadamente de plátanos durante octubre.
Obviamente, la clientela ha respondido muy bien a la iniciativa de Kiko, que lleva trabajando en este pequeño comercio 20 años y tiene unos compradores, damos fe de ello, muy fieles.
La prueba de la buena acogida es que muchas personas «han querido dar donativos para ingresarlos en la cuenta» destinada a esta ayuda y otras «han comprado esta fruta, sin ser consumidores habituales, únicamente por ayudar».
«Arrimar el hombro»
Lo tiene claro: «Es necesario arrimar el hombro cuando de verdad alguien lo necesita. Llevo muchísimos años de frutero y he ganado dinero gracias a ellos. Ahora, cuando a ellos les hace falta, es cuando les tenemos que ayudar».
Los productores de plátano de la zona se han visto muy seriamente afectados por el paso de la lava en su cosecha; de hecho, Kiko se plantea retomar esta iniciativa en el mes de diciembre de cara a la Navidad
Un acto de generosidad, de empatía y de solidaridad. El rico plátano de Canarias… Rico en sabor, rico en energía y rico en el corazón de personas como Kiko.