Fuentes vecinales del barrio toledano de Valparaíso han informado a encastillalamancha.es, que se ha solucionado el problema que denunciaban a través de este periódico días atrás, la persistencia de fuertes malos olores por la circulación de aguas fecales procedentes del arroyo de «Las Zorreras». El ayuntamiento de Bargas ha sellado la arqueta cuya rotura permitiría la circulación de aguas fecales por este arroyo, que acababan en el Tajo y sin depurar.
Aguas fecales hasta el río Tajo
El alcalde de Bargas, Marco Antonio Pérez, aseguró a ENCLM hace una semana que los técnicos estaban evaluando la situación del colector roto para dar una solución lo antes posible y el problema ha quedado resuelto. Según el relato de los vecinos, «por el arroyo de “Las Zorreras” de Valparaíso corrían aguas fecales procedentes de Bargas al romperse una arqueta que discurre por el exterior y cauce de dicho arroyo. Las aguas en cuestión llegaron más abajo del Mercadona, a escasos metros del Tajo, produciendo un nauseabundo olor; además, sucedía en paralelo a la Avenida del Madroño, la calle principal del barrio. El problema se ha solucionado, pues el Ayuntamiento de Bargas ha procedido al sellado de la arqueta».
En este sentido, afirman que desde la Asociación de Vecinos Río Chico hace meses que se había puesto esta situación en conocimiento del Ayuntamiento de Bargas y la Confederación Hidrográfica del Tajo, «que no se ponían de acuerdo en la mejor forma de llevar a cabo la reparación”, aseguran a ENCLM.
Retiradas las vallas del camino público
Asimismo, los vecinos han comprobado con satisfacción cómo las puertas y vallas metálicas que en su día el dueño de la finca instaló en el cauce del arroyo para impedir el paso a los vecinos a pesar de ser un camino público, han sido retiradas después de mucho tiempo. Actualmente y después de un litigio vecinal el Camino del Molino al Elegido en cuestión está abierto al público y por él se puede acceder hasta Bargas.