Con estas ayudas, como ha explicado el concejal, el Ayuntamiento reconoce de manera especial a los deportistas de alto nivel que llevan el nombre de Toledo “por bandera”, una iniciativa que por segundo año consecutivo ha contado con un presupuesto cercano a los 50.000 euros.
Los tres primeros clasificados en pruebas nacionales e internacionales
“Estas ayudas se otorgan a los tres primeros clasificados en pruebas de ámbito nacional e internacional”, ha comentado Pablo García, no sin antes lamentar que la gala de entrega de estos reconocimientos “se ha tenido que aplazar” por las circunstancias socio sanitarias.
“Este año no estaremos en el Teatro de Rojas para recibir a nuestros deportistas más laureados, la pandemia manda y nos tenemos que adaptar para garantizar la seguridad”, ha dicho.
Entre los deportistas beneficiarios de estas ayudas municipales, que suponen un impulso a su carrera y trayectoria, además de contribuir a la reactivación social y económica del deporte toledano, se encuentran Jaime Marqués, en natación; Isabel Fernández, en karate; Juan López, en atletismo; Irene Sánchez-Escribano, en atletismo, o Lucas Búa, también en atletismo, entre otros.
Mientras que los clubes que han accedido a estas ayudas, son, por ejemplo, el CD Aspaym, pádel; el CD Triatlon TriToledo, triatlón; el CD Down Toledo, natación; el CD Realidad Toledo, fútbol 7 inclusivo; el CD Monteverde, natación, o el CD Kidokan, karate kumite, entre otros.
Los daños de la gran nevada en la parte deportiva: 1,5 millones
Además, el concejal ha dado a conocer los daños que el temporal de nieve y hielo ha provocado en las instalaciones deportivas municipales, tras evaluar los diferentes espacios del Patronato Deportivo Municipal. Como ha explicado, los daños se han cuantificado en 1,5 millones de euros, siendo las piscinas cubiertas y las de verano las más afectadas por el temporal.
“Todas las instalaciones se han visto afectadas en mayor o menor medida, aunque en las que más desperfectos sumamos son las piscinas, tanto las cubiertas como las piscinas de verano al aire libre”, ha comentado el edil de Deportes, para detallar que, por ejemplo, en la piscina estival del Polígono se han contabilizado cinco árboles caídos, rotura de las pérgolas del puesto de socorro y de la zona de hostelería, y la posible rotura del vaso de la piscina por la presión del agua congelada.
Daños similares se han registrado en las piscinas de verano de Santa Bárbara, de Azucaica, de la Escuela de Gimnasia o del Parque Escolar, mientras que en las piscinas de invierno del Casco Histórico y del Polígono los desperfectos se centran en la red de tuberías y en las cubiertas, así como en el sistema de climatización, es decir, en la instalación de calefacción. También se han dañado varias tuberías de agua caliente sanitaria.
Daños en piscinas, pabellones…
Otras instalaciones deportivas municipales que han sufrido los efectos de la borrasca ‘Filomena’ han sido el pabellón cubierto del Polígono, donde se han detectado daños en las láminas de policarbonato de la cubierta, mientras que el césped natural de la pista de atletismo también está en mal estado por el hielo y las bajas temperaturas registradas durante días. Esto mismo ha ocurrido en otros espacios con césped natural, como el Estadio Municipal ‘Salta del Caballo’ o en la Escuela de Gimnasia.
El pabellón de La Legua o el de Santa Bárbara, así como el Javier Lozano en el complejo deportivo Salto del Caballo, han sido otras de las instalaciones en las que como ha explicado Pablo García se han producido daños importantes que el Ayuntamiento espera solucionar cuanto antes sea posible.
Asimismo, el concejal de Deportes ha tenido palabras de gratitud al personal del Patronato Deportivo Municipal, pues como ha destacado “se han implicado de forma voluntaria durante y después del temporal para recuperar la normalidad, al igual que los clubes, atletas y ciudadanos que ayudaron a retirar nieve de la pista de atletismo o de los accesos”, ha recordado.
En este sentido, también ha querido agradecer su trabajo a los arquitectos municipales y al Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha por su colaboración y ayuda en la revisión de las instalaciones y cuantificación de los daños ante “esta situación histórica jamás antes vivida en nuestra ciudad”.