La Policía Local de Toledo ha iniciado un expediente sancionador por una infracción grave de la Ley de Seguridad Ciudadana contra un hombre de 62 años que el pasado domingo por la noche se bajó de su furgoneta en una calle del barrio del Polígono, tiró desperdicios en la calle y acto seguido se puso a mear.
Acto seguido, reanudó la marcha haciendo eses y con una rueda reventada.
Y todo gracias a la importante colaboración ciudadana, ya que la llamada de un vecino alertó a los agentes de lo que estaba sucediendo.
La Policía Local de Toledo detectó un fuerte olor a alcohol
Cuando fue interceptado por los agentes, comprobaron que soltaba un fuerte olor a alcohol, tenía los ojos enrojecidos y se negó a realizar la prueba de alcoholemia, por lo que fue investigado por un presunto delito contra la seguridad vial.
En el registro de la furgoneta hallaron una escopeta de caza, pero el hombre no presentó ninguna documentación, aunque la Policía Local comprobó en la base de datos que sí tenía licencia de armas.
Aunque, ante los evidentes síntomas de encontrarse bajo la influencia del alcohol, el arma fue depositada en la Jefatura de la Policía Local.