Es el día más esperado para los más pequeños. Llevan todo el año portándose bien para recibir los regalos que los Reyes Magos de Oriente les traerán esta noche. Las miradas de los cientos de niños que acudieron a verlos en la Cabalgata de Toledo eran un fiel reflejo de la ilusión por esta fecha tan señalada y por la llegada de sus majestades.
Caras de asombro, prisas por coger caramelos y muchas sonrisas dieron paso a la comitiva. Una cabalgata que partió –como ya es tradición- del Centro Cívico de Buenavista para, a continuación, llegar por la Avenida de Portugal hasta la Avenida de Barber y la Avenida de la Reconquista, dos de las vías con más afluencia de público.
Acrobacias y un especial homenaje a grandes figuras de nuestra literatura han abierto paso a Melchor, Gaspar y Baltasar.
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En Bisagra les esperaban otros tantos niños y mayores deseando ver de cerca a los reyes en sus carrozas. Justamente allí, debido a la previsión meteorológica, finalizaba el paseo real por las calles toledanas, pero no si antes que el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, entregará las llaves de la ciudad a sus majestades para que posteriormente puedan entrar en las casas y repartir los regalos.
Este año durante el recorrido se han lanzado más de 6.000 kilos de caramelos para los más pequeños, que ahora marcharán deseosos de despertar y vivir una de los días más mágicos de sus vidas.