El sindicato UGT de Albacete ha denunciado «la persecución y caza al empleado público» por parte del Ayuntamiento de Villarrobledo (Albacete), donde se han producido 56 despidos de personal laboral o interinos desde diciembre de 2011. En un comunicado, la Federación de Servicios Públicos de UGT denuncia públicamente que entre los últimos 10 despedidos hay ocho interinos readmitidos en 2012 por haberse declarado improcedente su despido.
Según este sindicato, de los 56 despidos, al menos 25 han ganado las sentencias y su despido ha sido declarado improcedente por parte de los magistrados, «si bien ocho de ellos han pedido su readmisión y han vuelto a ser despedidos por parte del gobierno del PP».
Han explicado que entre diciembre 2011 y el 31 de julio de 2013, el consistorio de Villarrobledo ha despedido a dos trabajadoras del Programa «Kanguras», dos trabajadoras del Servicio de Ayuda Domicilio, otras tres trabajadoras del Programa Alcazul, un técnico del Programa Municipal de Drogas, otras dos monitoras de la ludoteca infantil y una trabajadora social del Programa de Familia.
En marzo de 2012, según UGT, el gobierno del PP en el Ayuntamiento de Villarrobledo despidió a cinco técnicos del PRIS, un técnico del equipo psicopedagógico, cuatro agentes de empleo, un administrativo de la Agencia de Desarrollo Local y un conserje de la Agencia de Desarrollo Local.
DENUNCIAN EL «DESMANTELAMIENTO DE SERVICIOS ESENCIALES»
Han criticado que «la persecución continuó en septiembre 2012 con el despido de tres técnicos de guarderías infantiles y otros dos auxiliares de este servicio y prosiguieron en octubre 2012 con el despido de una monitora de la piscina municipal y un técnico de la Emisora Municipal».
Además, en junio 2013 el gobierno del PP despidió a 16 empleados municipales: un monitor de la emisora municipal, otro del Centro de Día del Menor, un monitor del parque municipal de tráfico, otro de la biblioteca municipal, un conserje de biblioteca, tres jardineros, un sepulturero, un administrativo y un conserje de Deportes, tres monitores de la Piscina Municipal, un administrativo de Cultura y una monitora de la Universidad Popular.
Además, aseguran, esta semana se han recibido los preavisos de despido de 10 empleados municipales, a los que se les rescindirá el contrato con fecha 31 de julio, con el «agravante» de que ocho de ellos fueron readmitidos por sentencia judicial de despido improcedente en 2012.
Ante esta «lamentable situación», la secretaria general de la FSP de UGT Albacete, María José Tomás, ha denunciado el «desmantelamiento de servicios esenciales como las guarderías municipales o la promoción y orientación para el empleo, a pesar de la situación de emergencia social por el drama del paro que vive la localidad y la provincia de Albacete».