El Ayuntamiento de Carranque ha puesto en marcha un Plan urgente de desratización y desinsectación para evitar la proliferación de plagas en el municipio. Las tareas, que se están llevando a cabo en jornadas intensivas, han comenzado esta semana con la fumigación de 93 puntos conflictivos y van a continuar con la actuación en los imbornales y pozos de alcantarillado del resto de la localidad.
Con este plan, tal y como señala el Ayuntamiento en un comunicado de prensa, el equipo de Gobierno municipal pretende subsanar «las consecuencias de la falta de atención durante varios meses, que había derivado en la proliferación de cucarachas y ratas en diversos puntos». Esta situación podía suponer un riesgo para la salud de los vecinos, por lo que el Gobierno municipal decidió actuar con la mayor celeridad posible.
La empresa concesionaria del servicio de Desratización y fumigación, Denfor, había dejado de prestar servicio en el mes de mayo por la «dejadez del Gobierno anterior en la resolución de los trámites administrativos». El nuevo equipo de Gobierno municipal, cuya alcaldesa es Amelia María Guzmán (PP), ha conseguido desbloquear esta situación de emergencia sanitaria y, gracias a las gestiones realizadas con la Diputación de Toledo, la empresa llevó a cabo en el mes de agosto la fumigación del municipio de forma prioritaria, que se completa ahora con el desarrollo de este plan para alcanzar a toda la extensión de la localidad.
Gracias a las gestiones realizadas, una vez finalizado el plan de urgencia, el servicio seguirá prestándose de forma regular y sin interrupciones, para que no se vuelvan a producir episodios como el del pasado verano.
Por último, el Gobierno municipal ha agradecido la colaboración y el esfuerzo de la empresa para resolver la situación y recuperar la normalidad del servicio, muy necesario para evitar problemas de salubridad en el municipio.