Entre dos y tres horas diarias, siete días a la semana durante más de 10 años. Este es el tiempo y esfuerzo que le dedica a su deporte Inmaculada García Moreno, patinadora tomellosera dos veces campeona del mundo, quien ha tenido que elegir muchas veces en sus cortos 18 años de vida para compaginar su vida profesional y personal, algo a lo que ella misma resta importancia al haberle merecido la pena.
Ella es uno de los testimonios de las VII Jornadas «Soy Mujer», organizadas por Encastillalamancha.es y la UCLM, donde se han podido conocer algunos de los ejemplos que demuestran el esfuerzo diario que aún se tiene que hacer para conseguir una igualdad real entre mujeres y hombres, un camino que no se ha acabado de recorrer.
Un ejemplo para todos: «Quiero ser como tú»
Un deporte minoritario en el que cuando ella empezó los referentes eran hombres. Pese a ello, Inma reconoce que al ser «más nuevo» no se ha visto contaminado por «un machismo de superioridad física». La patinadora ha contado todo lo que le ha aportado sus experiencias en competiciones, algo que le ha permitido aprender a ver distintos enfoques de la vida que cree que no hubiera podido ser así sin el deporte.
Desde pequeña esta estudiante del Grado de Enfermería en el Campus de Toledo tenía el patinaje como un hobby y tras dos años desde que se inició, se lanzó a la competición. Seis años más tarde, su vida, como la de toda la población mundial, se paralizó con la llegada del covid-19. Un parón que le permitió echar el freno y coger fuerza para volver a la competición con una nueva mentalidad.
Tanto fue así que dio el salto a las competiciones internacionales conquistando uno de los títulos. «Siempre he tenido objetivos, pero nunca espere que fuera tan pronto», reconoce la campeona. En muchas de estas pruebas ha sido donde sus propios compañeros les ha expresado que, pese a competir en una categoría en la que siempre han destacado los hombres, a día de hoy existe el mismo nivel entre mujeres y ellos.
«Yo me sentí halagada de que se vea igual de interesante», admite Inma con una sonrisa en el rosto, la misma que le sale al recordar el momento en el que, en otra competición, niños se le acercaban para decirle «Quiero ser como tú» o «Quiero hacer lo que tú».
No todo ha sido y son facilidades en el camino de esta deportista. Desde su localidad ciudadrealeña le han bridando su apoyo para que pudiera entrenar diariamente en uno de sus pabellones, pero cuenta que desde que llegó a Toledo, todo es más complicado. Sudor y lágrimas para conseguir un lugar donde entrenar: «Al ser un deporte más minoritario, no me dan tantas facilidades», explica.
Sin embargo y pese al gran palmarés de esta joven su testimonio avala tener bien puestos los pies sobre la tierra. Sabe de sus éxitos, pero confiesa que no le gusta «fardar» de ellos. El sacrificio, empoderamiento y fortaleza le han hecho ponerse en lo más alto del pódium profesional, pero un sin duda, la han convertido en un ejemplo personal para todas las mujeres.
Esta VII jornada «Soy Mujer» cuenta con el patrocinio de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, el Ayuntamiento de Toledo, la Diputación de Toledo, el Colegio de Enfermería y BBVA.
Acción patrocinada por:
