El portavoz de la organización agraria UPA de Cuenca, Francisco Javier Moya, ha estimado que la tormenta de lluvia y granizo de ayer en Las Pedroñeras mermará en un 10 por ciento la producción de uva porque la tromba de agua afectó a casi 800 parcelas, muchas de ellas con el cultivo sin recoger.
En declaraciones a Efe, Moya ha indicado que alrededor de 800 hectáreas de viñedo se vieron afectadas por la tormenta y estima que si en al menos la mitad hubo daños se habrían perdido dos millones de kilos.
Cada año se recogen alrededor de 25 millones de kilos en esta zona de La Mancha conquense, en la que también se cultivan cebollas, que también se han visto afectadas, y algunos ajos, almacenados en naves que también han sufrido inundaciones y en las que se acumularon hasta 30 centímetros de agua.
Según Moya, todavía hay parcelas «en las que no se puede entrar» y si no se puede recoger pronto la uva «el daño puede ser importante» porque por el calor el grano roto escurre en el que está sano y se pudre.
La tromba de agua se produjo sobre las 17.00 horas de ayer, lunes, momento en el que cayeron más de 40 litros de agua por metro cuadrado en poco más de veinte minutos.