ENCLM te ofrece un especial en el que reúne seis rutas del vino de Castilla-La Mancha que están certificadas dentro de las Rutas del Vino de España, con ellas te enseñaremos la belleza de sus comarcas y qué lugares visitar.
Las seis rutas certificadas que conformaron el paisaje vitivinícola son Ruta del Vino de La Manchuela, Ruta del Vino de Valdepeñas, Ruta del Vino de Jumilla, Ruta del Vino de Méntrida y Ruta del Vino de Almansa.
Aunque en este especial no aparece la Ruta del Vino de La Mancha, una de las más importantes de la región, ya que hemos realizado un reportaje aparte del que puedes disfrutar y tomar nota para la próxima escapada.
Ruta del Vino de La Mancha, un viaje a la esencia del Quijote
Todas estas rutas enológico-turísticas ofrecen al visitante y al catador una serie de experiencias únicas para conocer in situ y de primera mano, por una parte, los mejores caldos de la región y, por otra, los innumerables reclamos turísticos de todo tipo (patrimoniales, históricos, folclóricos, culturales) ofrecidas por los municipios que conforman estos itinerarios.
El secreto de la Ruta del Vino de La Manchuela, los viñedos milenarios de las riberas del Júcar y el Cabriel
Entre los valles del río Jucar y el Cabriel está La Manchuela, una tierra que lleva plagada de viñedos desde hace, al menos, 2.400 años, y es un ejemplo de tradición vinícola que los lugareños han transmitido de generación en generación.
Hasta 27 municipios forman parte de la ruta de Manchuela; Motilleja, Mahora, Valdeganga, Villanueva de la Jara, Carcelén, Casas Ibáñez, Alarcón, Alatoz, Jorquera, Villamalea, Motilla del Palancar, Enguídanos, Pozo Lorente, Casas de Ves, Balsa de Ves, Alborea, Cenizate, Fuentealbilla, Iniesta, Quintanar del Rey, Navas de Jorquera, El Herrumblar, Graja de Iniesta, Villa de Ves, Alcalá de Jucar, Villatoya y El Peral.
Los alrededores de la Denominación de Origen Manchuela ofrecen singularidades como la biosfera del valle del Cabriel, la Cueva de la Judía, la ribera de Cubas o municipios que vale la pena descubrir como Jorquera o Alcalá de Júcar.
Asimismo, se pueden visitar el Castillo de Alarcón, el Castillo de Enguídanos las Murallas almohades, en Jorquera, o el Consistorio Villa Enriqueta, en Villanueva de la Jara, y la Torre de telegrafía óptica en la zona de Graja de Iniesta.
Puedes conocer más sobre esta ruta en este enlace.
La Ruta del Vino de Valdepeñas, una de las más conocidas en España para deleitar al paladar
Un recorrido compuesto por 10 municipios ciudadrealeños que atesoran una rica herencia en la producción de vinos: Moral de Calatrava, Almuradiel, Torrenueva, San Carlos del Valle, Granátula de Calatrava, Alhambra, Santa Cruz de Mudela, Castellar de Santiago, Viso del Marqués y la propia localidad que da nombre a esta Ruta, Valdepeñas. Diez sitios perfectos para deleitar al paladar y disfrutar de su historia, gastronomía, paisajes y patrimonio.
La Ruta del Vino de Valdepeñas ofrece una gran variedad de experiencias únicas para el visitante. Una de las actividades más populares es la visita a alguna de sus bodegas, una oportunidad para aprender sobre el proceso de elaboración del vino, degustar diferentes variedades y conocer la historia de la viticultura en la región.
Además, en los alrededores de la DO Valdepeñas, se pueden disfrutar de auténticos paraísos naturales, tales como las Tablas de Daimiel y las mágicas Lagunas de Ruidera. Además, la zona está salpicada de localidades de singular belleza, como Almagro y Villanueva de los Infantes.
Para los apasionados de la historia, los alrededores también ofrecen tesoros fascinantes, como el yacimiento prehistórico de la Motilla del Azuer en Daimiel, el imponente Palacio de El Viso del Marqués, el Castillo de la Estrella en Montiel o el Parque Arqueológico del “Cerro de las Cabezas”, en Valdepeñas.
Puedes conocer más sobre esta ruta en este enlace.
La garnacha tintorera, un secreto a voces para descubrir la Ruta del Vino de Almansa
La Ruta del Vino de Almansa se extiende por cuatro municipios – Almansa, Alpera, Higueruela y Hoya-Gonzalo – que componen una experiencia única en la que disfrutar de buenos caldos de la DO Almansa, a la vez que descubrir una tierra de contrastes con tintes manchegos y levantinos.
Así, las uvas de las cepas almanseñas tienen un matiz especial, único, que las hace diferentes a todas las demás. La garnacha tintorera es la variedad autóctona, una que es única por su color oscuro, por su sabor intenso que deja en boca un sabor de frutos rojos y negros maduros.
Durante la ruta no solo se puede disfrutar del vino, pues en la zona de Almansa aguarda vestigios almohades, enclaves para disfrutar de la naturaleza o yacimientos en los que el arte rupestre es imponente. Entre los lugares más importantes de la zona, destaca el Castillo de Almansa, un enclave que se impone por altura, de origen almohade y que en el siglo XIV pasó a manos del marquesado de Villena, el Museo de la Batalla de Almansa 1707 y sus Fiestas Mayores de Moros y Cristianos, declaradas de interés turístico internacional.
También son paradas obligatorias el Palacio de los Condes de Cirat o realizar la Ruta del Agua de los Molinos (Almansa) y visitar el gran complejo de lagunas de Higueruela, Pétrola y Corral Rubio.
Como broche final, la comarca almanseña guarda las Cuevas de Pinturas Rupestres de Alpera, con más de un centenar de muestras de hace unos 5.000 años. A escasos minutos, en Higueruela se pueden descifrar los secretos del mundo andalusí en el yacimiento de la Alquería de La Graja.
Puedes conocer más sobre esta ruta en este enlace.
Los lugares únicos son la excelencia de un viaje por la Ruta del Vino Méntrida-Toledo
Conoce las bondades de una zona, entre Toledo y la sierra de Gredos, con recursos enológicos, naturales y culturales que merecen la pena y pueden aportar un plus de riqueza para quien no lo espera en la Ruta del Vino Méntrida-Toledo.
Méntrida, Torrijos, Camarena, La Torre de Esteban Hambrán, Escalona, Maqueda, Montearagón, Fuensalida, Carmena, Quismondo y Nombela. 11 localidades claves en la cultura del vino de la provincia de Toledo y de Castilla-La Mancha y que conforman la Ruta.
Una ruta que, en realidad, es una propuesta de viaje con el vino de la DO Méntrida como auténtico protagonista, sin olvidarnos de que es una zona con buenos caldos, de hecho los vinos de la DOP Méntrida rememoran una tradición centenaria, cultura vitícola y de buen hacer.
Así, uno de los atractivos de la ruta es la multitud de pueblos que visitar, donde encontrarás espacios únicos, entre ellos, el Museo de las Cuevas del Castillejo, en Méntrida, el entorno natural con el pinar Prado Palacios, en Camarena, o la Ruta de los Murales, en Escalona.
También es interesante ver la representación de la Pasión de Cristo por parte de los vecinos, en Camarena, el castillo de Maqueda, declarado Bien de Interés Cultural en 1931, o el nido de cigüeña más grades de la región, en Montearagón.
Puedes conocer más sobre esta ruta en este enlace.
La uva Monastrell, el secreto mejor guardado de la Ruta del Vino de Jumilla
Al reclamo de la uva Monastrell, santo y seña de las 22 bodegas asociadas a esta ruta, se le unen los encantos turísticos de las dos poblaciones más grandes de la misma, Jumilla y Hellín, a las que se les añaden Fuente Álamo, Montealegre del Castillo, Ontur y Tobarra. Estas seis poblaciones componen la Ruta del Vino de Jumilla.
Además de los parajes naturales de todo el territorio como La Pedrera, El Carche, o El Madroño en Ontur el visitante puede disfrutar de un rico patrimonio histórico y arqueológico de millones de años, como las huellas fósiles de la Hoya de la Sima datadas en el Mioceno Superior en Jumilla. También hay numerosos abrigos de pinturas rupestres prehistóricas por todo el territorio como las de Minateda en Hellín o las del Barranco del Buen Aire en Jumilla.
Unos eventos interesantes son las semanas santas – tamboradas de Tobarra y Hellín, de interés turístico, además de patrimonio inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
De época histórica cabe señalar en la DO Jumilla la gran huella íbera a través de la visita al yacimiento de Coimbra del Barranco Ancho en Jumilla o el famoso santuario ibérico del Cerro de los Santos en Montealegre del Castillo, de donde se extrajo la Gran Dama Oferente.
Para los amantes de la Edad Media, el panorama se completa con la presencia del parque arqueológico de Tolmo de Minateda en Hellín, el Santuario de Nuestra Señora de la Encarnación y la Ermita del Cristo de la Antigua en Tobarra y el Castillo de Jumilla.
Puedes conocer más sobre esta ruta en este enlace.
Viajar por Castilla-La Mancha
Además de esta guía de rutas de vino, el turismo en Castilla-La Mancha ofrece muchas posibilidades con las que viajar descubriendo la historia de la región, deslumbrando con su rico patrimonio y bellos espacios naturales. Te detallamos algunas propuestas, pero hay muchas opciones.
Así, la Dirección General de Turismo, Comercio y Artesanía del Gobierno de Castilla-La Mancha tiene una completa publicación oficial que es una herramienta de consulta muy útil, con información completa y fiable. Puedes encontrarlo todo en este enlace de guías de viajes.
La opción de las empresas de turismo activo y ecoturismo
También es posible contar con los servicios que ofrecen las empresas de turismo activo y ecoturismo que trabajan en los espacios mencionados, a fin de disfrutar de divertidas actividades guiadas por monitores expertos.
Para que esta ruta festiva tenga la mayor posibilidad de disfrute, te invitamos a que descubras algunos de los restaurantes que cuentan con el sello de Raíz Culinaria, la marca distinguida de la gastronomía castellanomanchega.
Sin olvidarnos del mejor descanso, que está asegurado recurriendo a la Red de Hospederías de Castilla-La Mancha, una experiencia inolvidable cuyos factores diferenciales son el alto nivel de calidad, la singularidad y la excelencia.