El juzgado de instrucción número 2 de Guadalajara ha señalado para mañana miércoles, 29 de enero, una diligencia de inspección ocular en el lugar en el que el pasado 23 de octubre se produjo la muerte de un presunto delincuente por un disparo de un guardia civil.
Según la resolución, el juez ordena a la Policía Judicial que «dispongan lo necesario» para la práctica de la diligencia, en especial que en dicha fecha y hora se encuentre en el lugar los mismos vehículos y obstáculos que había en día en que ocurrieron los hechos.
Asimismo, el juez señala en su providencia que se habrá de proceder por responsables de la Policía Judicial a la grabación en soporte videográfico de la totalidad del acto.
A la diligencia, que está señalada a las 12,00 horas en el polígono industrial de Cabanillas del Campo donde ocurrieron los hechos, están citadas las partes, así como el guardia civil imputado por homicidio imprudente y su propio abogado.
No obstante, el juez rechaza la práctica de la diligencia de reconstrucción informática de los hechos solicitada también por la familia del fallecido al entender que «constan unidos a los autos el acta de inspección ocular e informe fotográfico elaborado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad».
La inspección ocular se realizará a petición del letrado de la familia del joven fallecido, G.L.R., de 25 años de edad, que murió el día 23 de octubre de 2013 a consecuencia de «un shock hipovolémico» (pérdida masiva de sangre) como consecuencia de «lesiones por arma de fuego».
Los hechos tuvieron lugar en la tarde del 29 de octubre de 2013, cuando tres personas encapuchadas entraron con una escopeta en una nave del polígono industrial de Cabanillas del Campo y realizaron un disparo al techo cuando se vieron sorprendidas por los trabajadores.
Minutos después, llegaron hasta el lugar de los hechos varias patrullas de Guardia Civil de Guadalajara y Policía Local de Cabanillas del Campo, quienes hicieron una batida por las calles del polígono.
Una de estas patrullas se encontró a tres personas entre una grúa y una pared, por lo que mientras un agente les daba el alto, el otro les cortaba la salida, según la declaración judicial del agente imputado, a la que ha tenido acceso Efe.
En un momento dado, según esta declaración, el agente tuvo miedo al sentirse amenazado por estos tres individuos y disparó al pensar que escondían el arma en un lugar donde él no podía verla.
Según la declaración judicial del agente imputado, les escuchó decir dirigiéndose a él: «Ya verás tú», a la vez que hicieron un giro brusco hacia donde él estaba, momento en que efectúa un único disparo con su arma reglamentaria «a modo de advertencia y con carácter preventivo más que otra cosa».
El supuesto delincuente cayó posteriormente a un barranco por donde pasa un arroyo y fue encontrado media hora después del disparo, si bien nunca se encontró ni la escopeta ni los pasamontañas con los que los supuestos atracadores de la nave ocultaban sus rostros.