El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido este lunes al presidente nacional del PP, Pablo Casado, que apoye la prórroga del estado de alarma planteada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez pese a las críticas que mantenga hacia su gestión.
En una rueda de prensa tras la firma de un pacto económico con agentes sociales de Castilla-La Mancha, Page ha hecho esta petición «a todos los partidos políticos, a los que piensan en España, a los que tienen por delante los intereses generales», pero de manera especial a Casado y al PP «aunque sea con mucha crítica».
El jefe del Ejecutivo autonómico ha manifestado que «nadie en su sano juicio hubiera querido estar al frente de este barco en este vendaval» pero ha subrayado que «más importante es no quitarle el timón al que lo lleva que discutir su estrategia».
«Un apoyo desinteresado de un partido de país y de Estado»
En este sentido, ha señalado que si hay una formación política en España que tenga «una alternativa integral» a la situación y que sea «asumible» desde las instituciones y el Gobierno, sería «perfecto»; pero ha apostillado que el apoyo que pide al PP es «de distinto tipo al que le podía pedir mañana a los independentistas» porque tiene que ser un apoyo «desinteresado de un partido de país y de Estado».
Para Page, el PP tiene que demostrar, después de haber gobernando en situaciones también difíciles con elementos muy conflictivos de violencia en España y drama económico y social, que «se puede estar muy crítico, total y frontalmente, pero no arrebatar el timón» porque «en un vendaval de esta naturaleza es determinante saber el rumbo que se tiene», ha reiterado.
Además, el presidente castellanomanchego ha dicho que hace esta petición desde una comunidad autónoma «muy afectada por el virus» que cuenta con un «enorme sistema sanitario muy recuperado en estos años» y que seguirá apostando por la «prudencia».
«Hay que apoyar al Gobierno de España sea quien sea, nos guste o no, sobre todo cuando no coincidimos con él», ha resaltado, porque a su modo de ver «en los momentos de crisis hay que apoyar aunque no haya que aplaudir».
Por lo tanto, ha hecho hincapié en que no pide «coincidencia ni complacencia, ni menos aún aplausos» pero sí «que no se discuta la iniciativa del que va a tener al final la culpa o responsabilidad de todo lo que pasa», ha concluido.