La Fundación Caja Rural de Castilla-La Mancha acaba de nombrar presidenta de honor de la institución a María Dolores de Cospedal, quien en el acto oficial no dejó pasar la oportunidad para destacar la excelente labor que está realizando la fundación «en este mundo de aguas turbulentas en el que nos encontramos hoy, económica y socialmente hablando».
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Se trata de una labor muy presente en todos los ámbitos de la sociedad castellanomanchega: promoción cultural y profesional, formación, solidaridad, discapacidad, desarrollo económico, voluntariado, ayuda social… En los últimos años han sido numerosas las organizaciones que se han beneficiado de esta manera que tiene la caja de relacionarse con los demás.
Así, según la memoria de la Fundación Caja Rural de Castilla-La Mancha, y dentro de lo que es el ámbito de la promoción cultural, profesional y asistencial, a finales de 2010 y principios de 2011 llevó a cabo la III Campaña de Recogida de Alimentos y Juguetes, una iniciativa solidaria dirigida a empleados, clientes y sociedad en general que tiene por finalidad ayudar a las personas más necesitadas durante las fechas navideñas; patrocinó la IV edición del Concurso de Christmas de la Escuela de Música de Toledo «Diego Ortiz»; ayudó en la exposición-venta solidaria de productos sudamericanos de comercio justo, en colaboración con la Fundación Coprodeli; abrió una cuenta solidaria a favor de los damnificados por el terremoto de Japón; abrió la «Cuenta Solidaria» a nombre de Cáritas dentro de la campaña «Las necesidades no entienden de fechas»; y firmó un convenio de colaboración con Hogar Zoe Hijas de la Caridad para apoyar la rehabilitación e integración de jóvenes con problemas de drogadicción.
Con el objetivo de fomentar el desarrollo social y económico de la región han sido muchos los convenios firmados con diferentes entidades. Desde el Arzobispado de Toledo, el Centro Cooperativo Farmacéutico Talaverano y Oleotoledo hasta Asaja Toledo, Coag, Consejo Regulador de la Denominación de Origen «Montes de Toledo», UPA Toledo… El campo, los empresarios y aspectos como la cultura del aceite de oliva han recibido un fuerte apoyo por parte de la fundación en 2011.
Conscientes del importante papel que ejerce el voluntariado como salvaguarda de los valores que hacen que nuestra sociedad progrese, la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha se propuso para 2011 la creación de un grupo de voluntariado compuesto por los trabajadores de la entidad. En 2011, para mejorar la calidad de vida del desarrollo comunitario, establecieron lazos de colaboración con la Asociación de Mujeres del Mundo Rural para, entre otras cosas, propiciar la igualdad real de oportunidades; la Federación Marsodeto, después del año de padrinazgo del presidente de Caja Rural Castilla-La Mancha, Andrés Gómez Mora; la Hermandad de Donantes de Sangre de Toledo; Alcer Toledo, ayudándoles en la organización de una exposición de dibujo y narrativa; Apace y Apanas, para mejorar sus servicios; Asociación de Diabéticos de Toledo; y Asociación de Ayuda al Minusválido de Yepes.
No hay que olvidar tampoco la cátedra de estudios cooperativos que promueve la Fundación Caja Rural Castilla-La Mancha y las actividades, trabajos y publicaciones que ha realizado.