El Museo de los Concilios y la Cultura Visigoda de Toledo ha sido escenario hoy de la presentación del Plan Estratégico de Cultura diseñado por el Gobierno regional, en colaboración con diferentes agentes culturales, para marcar el futuro de este sector, un acto en el que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado la creación de centros regionales de la cultura en los que estén representados ámbitos como la etnografía (cuya ubicación ya está prevista en Ciudad Real), la música, el cine, la artesanía, las artes escénicas, la fotografía…
El presidente ha concretado los tres ejes en los que se basa este plan. El primero de ellos es que «la cultura no esté al pairo de las circunstancias políticas» ya que «forma parte de nuestra identidad». En su opinión, también es importante considerarla una industria más que contribuya a la generación de riqueza y alcanzar los ratios de otros países europeos en los que el 12 por 100 de su PIB está vinculado a la cultura, una cifra que en España ronda el 5 por 100.
Con la vista puesta en la sostenibilidad de la cultura y en que se zafe de esos vaivenes políticos, apuntaba que «nos esforzaremos en asentar bien las bases del modelo organizativo, tanto a nivel financiero como a nivel metodológico». A este respecto hacía referencia a la ley de mecenazgo -que llegará a las Cortes regionales y cuya aprobación se espera para este año- y al 1 por 100 Cultural. Igualmente, «es preciso crear unas bases sólidas que permitan tener una estrategia a medio y largo plazo», de ahí que haya anunciado la creación de centros regionales «para cada una de las patas de la cultura». Ha adelantado que a los de artesanía previstos en Toledo y Talavera se pondrá en marcha uno más de etnografía en Ciudad Real y, a falta de concretar ubicación, se ampliará la red con el cine, la música, las artes escénicas, la fotografía…
No sin antes ahondar en que la Junta organizará una agenda de grandes eventos, Page ha indicado que «si en seis años Castilla-La Mancha tuviera mecanismos estables de financiación e instituciones regionales para organizar cada expresión cultural, habríamos dado un salto de gigante para garantizar la sostenibilidad de la cultura».
El Plan Estratégico de Cultura, válido hasta 2025 y que sustituye al de 1997, establece seis objetivos estratégicos, 46 planes de acción y 108 programas. Según ha explicado en la presentación el viceconsejero de Cultura del Gobierno regional, Jesús Carrascosa, estos objetivos son:
- Reafirmar el valor de la cultura como derecho y hacerla accesible a todos los castellanomnchegos, independientemente del lugar en el que residan. Aquí se contempla, entre otras cuestiones, crear una agenda digital para Castilla-La Mancha en colaboración con el resto de instituciones; desarrollar una red de espacios culturales y creativos; y un programa de cultura en la calle.
- Situar la cultura como oportunidad para el desarrollo social y económico de los habitantes de Castilla-La Mancha, ámbito en el que se quiere hacer planes para atraer talento, profesionalizar el sector de la cultura y fomentar la comercialización de sus productos.
- Potenciar el papel de la cultura en Castilla-La Mancha mediante la coordinación de las entidades y agentes que intervienen en ella. Se creará un Observatorio de Políticas Culturales.
- Crear modelos que faciliten y aseguren la participación efectiva de la sociedad civil en el desarrollo de la cultura en Castilla-La Mancha. Dentro de este objetivo, se establecerá un Foro Social de la Cultura, con carácter consultivo, se potenciará el voluntariado cultural y se creará una política activa de mecenazgo.
- Procurar la formación permanente de todos los que intervienen en el campo de la cultura regional, para generar nuevas oportunidades y garantizar una sociedad democrática y desarrollada.
- Conservar el patrimonio cultural de Castilla-La Mancha, como vía para crear nuevas señas de identidad para sus gentes y difundir su valor dentro y fuera del ámbito regional. Para el viceconsejero, este es el objetivo más ambicioso del Gobierno.
Todo ello será financiado, añadía Jesús Carrascosa, a través de dos herramientas: la ley de mecenazgo y el 1 por 100 Cultural. Además, habrá controles de evaluación que vendrán de la mano de órganos como el Observatorio de Políticas Culturales, el Foro Social de la Cultura y mediante auditorías y otros organismos de participación.
Por su parte, el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Ángel Felpeto, ha puesto de manifiesto que, desde 2006 que finalizó el anterior plan estratégico, «se ha echado de menos una hoja de ruta». Ponía en valor que, a pesar de las carencias de los últimos años, servicios culturales como la red de bibliotecas o la red de teatros «no han mermado en calidad» gracias a que «hay un camino bien trazado y gracias también al compromiso de los que han tenido la responsabilidad de gestionarlos».
Afirmaba que «el abandono de la red de parques arqueológicos nos debe servir de ejemplo para saber dónde están las carencias», por lo que abogaba por un nuevo modelo de gestión de estos recursos. Apostaba además por que el arte contemporáneo recupere su espacio ya que «ha demostrado estar ligado a esta tierra».
Ha destacado la prioridad que otorga el Ejecutivo a la cultura y para ello ha expuesto que en 2017 este área tendrá un presupuesto de 32 millones, un 23 por 100 más que en la anterior legislatura.