Una obra en el que el «relato candente, vivo y conmovedor de Gerardo no es un cuento, no es una novela, y, sin embargo, tiene la belleza de lo único, lo original, de aquellos relatos que narran la vida desnuda, bella en su crudeza», como afirma Fray Miguel Márquez.
La Feria del Libro de Toledo ha acogido el diálogo con sus lectores y firma de ejemplares de Gerardo López Laguna, autor de «Dios en Sarajevo. Memoria de un pacifista», editado por Trébedes.
Una obra que narra el compromiso pacífico, solidario y consolidado en la fe de Gerardo López, que en diciembre de 1992 participó en una marcha de 500 personas desarmadas, que atravesaron el cerco de la ciudad sitiada de Sarajevo, para llevar un mensaje de paz a las víctimas de la guerra. De igual manera, se narra como unos meses después, Gerardo y algunos de sus compañeros volvieron a entrar en Sarajevo para preparar la entrada de otra marcha más numerosa, que nunca llegó porque quedó retenida en Mostar. El grupo permaneció en Sarajevo conviviendo con la población de la ciudad sitiada.
En medio de los disparos de mortero, los francotiradores y los bombardeos, sus armas eran la entrega, la solidaridad en el sufrimiento y el afán de servicio a los demás. Llegando incluso, como le ocurrió a Gabrielle Moreno, a dejarse la vida en su tarea.
Fray Miguel Márquez expresa, sobre el libro, que «por los entresijos de aquellas miradas, en el sabor de aquellos platos, contenida estaba una historia de horror y miedo, pero también asomaba una fe poderosa, la de aquellos que aceptan nacer de nuevo, en las entrañas de aquellas gentes, quería yo adivinar el paso de personas como Gerardo, que arriesgaron, haciendo suya una guerra en la que no habrían sido invitados, para ser paz con la presencia, y oración, y Eucaristía».
Además, Fray Miguel Márquez afirma que «mientras haya una persona que ore, que le hable a dios, con la sencillez que se hace en este libro, ninguna guerra tendrá la última palabra, y aún habrá – enfatiza – esperanza».
Integridad, audacia, compromiso con los desfavorecidos, hechos, sencillez, humildad y espiritualidad, son los caracteres de siempre en los que encontramos a Gerardo López, persona entregada y sacrificada, con compromiso auténtico y profundo, que radica en el compromiso militante con la Fe. Un libro que da testimonio y manifestación de ese compromiso y pacifismo.